La mejor manera de librarse de la tentación es
¿caer en ella?
Salió un anuncio en la televisión diciendo esto que se puede librar de la tentación cayendo en ella y es verdad, que todos tenemos tentaciones. La tentación significa “poner a prueba o solicitar al mal”. Es conllevar la idea de inducir a alguien a pecar. Es una prueba que corresponde al interior del hombre. Lo que sale de la persona es lo que contamina. Existen pruebas en las que pasamos cada día, cada momento, en pensar cosas que no debemos pensar, decir cosas que no debemos decir, o hacer cosas que no debemos hacer siendo Hijos de Dios y comprados por un precio. (1 Corintios 7:23). Unos ejemplos son la inmoralidad sexual, los robos, los homicidios, los adulterios, la avaricia, el engaño, la invidia, la culumnia, la arrogancia, y la necedad (Marcos 7:20-23).
Pero cayendo en la tentación resultará en la muerte en vez de la vida. En vez de estar más felices resultará en que estamos más tristes (como el Espíritu de Dios mora en el creyente dice Efesios 1:13 y debemos “andar” en el Espíritu (Gálatas 5:16) y no ver su fruto en nuestras vidas (Gálatas 5:22-23). De caer en la tenación es cosa de la carne (1 Juan 2:16).
Muchos enfermedades, fracasos, adicciones, dificultades para hacer amistades y conductas destructivas se origen en estos motivadores. Como Jesús dijo, el fruto viene del árbol (Mateo 12:33-35). (1)
Ahora de ser tentado no es malo. Jesus fue tentado como se ve en Hebreos 4:15; Mateo 4:1-11; y Marcos 1:12-13. Pero siendo tentado, no cayó. No había pecado en él (1 Juan 3:51 Pedro 1:19).
I. La fuente de la tentación
Santiago 1:13-18 = “Que nadie diga cuando es tentado: Soy tentado por Dios; porque Dios no puede ser tentado por el mal y El mismo no tienta a nadie. Sino que cada uno es tentado cuando es llevado y seducido por su propia pasión. Después, cuando la pasión ha concebido, da a luz el pecado; y cuando el pecado es consumado, engendra la muerte. Amados hermanos míos, no os engañéis. Toda buena dádiva y todo don perfecto viene de lo alto, desciende del Padre de las luces, con el cual no hay cambio ni sombra de variación. En el ejercicio de su voluntad, El nos hizo nacer por la palabra de verdad, para que fuéramos las primicias de sus criaturas.”
La tentación normalmente corresponde a los deseos e impulsos del hombre. La Biblia habla sobre varios tipos de deseos:
- El deseo del fruto prohibido (Génesis 1:3-6).
- El deseo de las tierras fértiles (Génesis 13:10-13).
- El deseo de saciar el apetito (Génesis 25:29-33).
- El deseo de obtener plata y oro (Josué 7:21).
- El deseo de poseer mujeres (1 Reyes 11:1-4).
- El deseo de la ambición (Marcos 10:35-37).
II. Los resultados de caer en la tentación.
Ahora de tener deseos no es malo. Dios nos ha dado emociones y con estas emociones vienen los deseos. Un ejemplo bueno de deseos se ve en Salmos 37:4 que dice, “Pon tu delicia en el SEÑOR, y El te dará las peticiones de tu corazón.” Aquí se ve claramente que tenemos que poner nuestros ojos primero en el Señor (Juan 9:17) no en la cosas del mundo (1 Juan 2:16). Y al hacer esto nos dará los deseos de nuestro corazón porque queremos lo que Él quiere.
Pero al caer en la tentación, esto sí es malo.
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Esta nos conduce a cortar nuestra comunión con Dios. (1 Juan 1:6).
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Esto es lo que Satanás quiere. El es el padre de la oscuridad (Hechos 26:18; Colosenses 1:13).
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Damos un mal testimonio al mundo del poder de Dios. (Lucas 8:39; Marcos 5:19; 1 Corintios 8:9, 13).
III. Cómo vencer la tentación (vs. 17)
En versículo 17 dice, “Toda buena dádiva y todo don perfecto viene de lo alto, desciende del Padre de las luces, con el cual no hay cambio ni sombra de variación.”
Aquí se ve que “toda buena dádiva” y “todo don perfecto” vienen de Dios. Entonces para vencer la tentación se puede hacer tres cosas:
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Niégate a ti mismo (Mateo 16:24; Romanos 6:11). Cuando esté tentado y quiere hacer algo en debido, con tu propia voluntad decir “!no! ¡Esto no lo hago!” Decir no a tus deseos carnales igual como Jesús hizo con sus deseos en el jardín de Getsemani (Lucas 22:42). Para llegar a ser fuerte hay que tomar muchos pasos. Es un largo proceso ¡pero vale la pena!
….2. Evitar el camino de la tentación.
- Si tiene la tentación de comer más que su cuerpo necesita- cambiar sus hábitos en comer. Los hábitos que tiene pueda afectar mucho su caída en la tentación.
- Si tiene una tentación con el sexo, es mejor no “dar a comer” esta tentación. Mira por dónde normalmente viene (sea por revistas, el Internet, o otras cosas) y cambia el hábito que tiene. Evitar estando en un lugar dónde pueda estar tentado.
- Si tiene una tentación de chismear (1 Timoteo 5:12-13), mejor enfocar en hablar de lo bueno ( Filipenses 4:8) y no lo malo.
….3. Acercarse más a Dios y Su Palabra.
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Dios desea lo mejor para Usted.
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Dios siempre provee una salida (1 Corintios 10:13).
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Stanley Jones dijo, “Un amigo mío descubrió que un estudiante tenía las paredes de su cuarto llenas de pósteres pornográficos, pero en vez de reprenderlo, le obsequió con un cuadro muy hermoso de Cristo, una joya de arte y belleza. El estudiante lo colgó entre los pósteres, pero se dio cuenta inmediatamente de que ambos no podían estar juntos y entonces se deshizo de los pósteres y se quedo con el de Cristo. No había lugar para los demás.”
Fuente:
(1) Dr. Henry Cloud y Dr. John Towensend, ¿Cómo Crecemos? Vida, 2005.
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