La siguiente es una intervención reciente en un blog, durante el curso de un debate con un ateo. Creo que es importante porque desinfla el clásico argumento ateísta de vincular a Dios con los crímenes de Hitler. – Pablo Santomauro
A la lista de los millones de muertos que nos dejó la visión atea del mundo a lo largo de la historia, podemos agregar el genocidio de seis millones de seres humanos durante la era del nazismo en Alemania. Sin duda, las teorías de Darwin han dejado su marca en la sociedad moderna desde el punto de vista moral.
“Eugenesia”[1] no es un término muy conocido por el público en general. La palabra fue acuñada por el primo de Darwin, Sir Francis Galton, en 1883. Este personaje y sus seguidores creían que la “sobre vivencia del más fuerte” no debía dejarse en manos de la naturaleza, sino de ciertos hombres.
En otras palabras, la esencia de la evolución es la selección natural. La Eugenesia podía reemplazar a la selección natural mediante una selección artificial, planeada y ejecutada por el hombre (ciertos hombres), a los efectos de acelerar la evolución de las características “deseables” y eliminar las “indeseables”.
Las ideas de Darwin y Dalton fueron recogidas en Alemania por Ernst Haeckel, un doctor desconocido que pronto se convirtió en el apologista líder en materia de evolución en su país. Las obras de Haeckel y el mensaje de Darwin se propagaron rápidamente por la Alemania Nazi, y fueron el combustible que avivó el deseo de Hitler de hacer de la raza Aria la superior. ¿El método? Eliminar a los judíos y otras razas inferiores basado en la capacidad inherente de la evolución para clasificar varias razas humanas como especies separadas.
El historiador Richard Weikart afirmó que los escritos de Haeckel, haciendo eco del naturalismo darwiniano, fueron el ímpetu detrás de la Eugenesia. Haeckel lamentaba alguno de los efectos “disgénicos” (anglicanismo por degeneración biológica de los descendientes) en la civilización moderna y manifestó abiertamente su apoyo por la Eugenesia. En este contexto, Haeckel habló favorablemente de la práctica de los espartanos de matar a los niños débiles o enfermos.
Por un lado Haeckel adhirió a la noción de los alemanes de que la vida comenzaba en el momento de la concepción, pero por el otro aceptaba el aborto basado en la noción darwiniana de que el feto humano tiene el mismo valor que el de un animal. En forma velada, Haeckel dio su sello de aprobación al infanticidio, el aborto, todo tipo de eutanasia y aun la muerte voluntaria de los discapacitados físicos y mentales. La gran mayoría de los seguidores de Darwin apoyaron a Haeckel y ayudaron a desarrollar esta horrible aproximación ética.
El darwinismo por sí solo no causó el holocausto, pero sin las ideas de Darwin, ni Hitler ni sus simpatizantes hubieran encontrado el apuntalamiento científico necesario para convencerse ellos mismos de que la atrocidad del holocausto era moralmente justificable.
A pesar de la evidencia, Sam Harris, uno de los perros cancerberos del “nuevo” ateísmo moderno, tiene el descaro de decir que las acciones de Hitler fueron causadas por el cristianismo, basado en las palabras de Hitler en su libro Mein Kampf. Afortunadamente, el apologista Dinesh D’ Sousa, cita en su libro What’s so Great about Christianity(2007, p. 222), palabras de Hitler manifestando que sus declaraciones en Mein Kampf fueron pura propaganda para consumición del público.
D’ Sousa escribe:
“Si el nazismo representó la culminación de algo … ese algo fue la ideología del darwinismo social … Sam Harris sencillamente ignora la evidencia por las simpatías nazis hacia Darwin, Nietzsche y el ateísmo … por lo tanto, ¿qué sentido tiene su reclamo de que los líderes nazis fueron ‘conciente o inconcientemente agentes de la religión’? Ciertamente ninguno”.
Una vez que comparamos notas, Hitler y la Eugenesia, nos damos cuenta que el racismo es un ingrediente esencial en la obra de Darwin. En los libros de la obra máxima de Darwin, el título original siempre aparece oculto detrás de ilustraciones de mamíferos, reptiles, aves e insectos. El título original es “El Origen de las Especies por medio de la Selección Natural, o LA PRESERVACION DE LAS RAZAS FAVORECIDAS EN LA LUCHA POR LA VIDA” (mayúsculas nuestras).
¿No es este título repulsivo? <>
* Extractado y adaptado libremente de “The Ethics of Darwin or the Ethics of Design: How Science and Society have been Impacted by the Error of Evolution.”/ “La ética de Darwin o la ética del diseño: Cómo la ciencia y la sociedad han sido impactadas por el error de la evolución”.Ponencia presentada en la reunión anual de la Sociedad Internacional de Apologética Cristiana, por Jack L. Greenoe, Junio 7, 2008.
1] “La eugenesia es la auto-dirección de la evolución humana”: Lema del Segundo Congreso Internacional de Eugenesia, 1921.
Pablo Santomauro fue subdirector de CIR. “Apología Cristiana”, CIR, P.O.Box 846, Montebello, Cal. 90640-EE.UU. URL de CIR: (en español). El Centro de Investigaciones Religiosas (CIR) es una organización interdenominacional especializada en la apologética de sectas. Fue pastor ordenado, autor profuso de artículos relacionados con la disciplina de la apologética cristiana y conferencista especializado en sectas y religiones comparada.