Mas tarde, el 29 de marzo de 1994, un grupo de unos 40 representantes de ambas iglesias firmó un acuerdo que se titula: “Evangélicos y Católicos Juntos: La Misión Cristiana en el Tercer Milenio”. Entre ellos eran evangélicos como Pat Robertson, Charles Colson, Dr. John White (presidente del Colegio Geneva y expresidente de la Asociación Nacional de Evangélicos), Dr. Mark Noll (presidente de la Universidad de Wheaton ), Dr. Richard Mouw (presidente del Seminario Fuller), Dr. Larry Lewis (presidente de la Home Misión Board, una asociación de Bautistas del sur), Dr. Jesse Miranda (las Asambleas de Dios), Dr. Bill Bright (presidente de Campus Crusade for Christ y Ágape), Dr. Os Guiness (de Trinity Forum), y Dr. J.I. Packer (autor del libro Conociendo a Dios y profesor de Regent Collage).
El propósito del dicho documento era buscar una plataforma común para tratar los problemas sociales. Los temas principales presentados en el documento eran
el evangelismo,
la libertad religiosa y
los problemas sociales.
Los temas principales presentados en el documento fueron traducidos a ruso, portugués, polaco y español.
El documento consistía de unas 28 páginas y estaba dividido en 7 partes. La primera era una introducción al temático. En ella confirmó que había cerca de 1.700 millones de cristianos en el mundo, de los cuales 1.000 millones eran Católicos Romanos y otros 300 millones eran Evangélicos Protestantes. A pesar de que los dos estuvieran creciendo, existían conflictos entre ellos y esto afectaba su testimonio como cristianos en el mundo. Concluía diciendo,”…somos llamados y estamos decididos a explorar formas de trabajar y evangelizar juntos para que la única misión de Cristo avance.” (Página 4)
La segunda parte se trató de lo que los dos se afirmaron juntos. Las declaraciones eran:
(1) afirmamos juntos que Jesucristo es Señor;
(2) afirmamos que estamos justificados por gracia a través de la fe en Cristo y su obra;
(3) afirmamos que todos quienes aceptan a Cristo como Señor y Salvador son hermanos y hermanas en Cristo;
(4) afirmamos juntos que todo cristiano debe enseñar y vivir en obediencia a las Escrituras inspiradas, las cuales son la Palabra Infalible de Dios. Además,
(5) afirmamos que Cristo ha prometido a su iglesia el Espíritu Santo quien nos guiará a la verdad en discernir y declarar las enseñanzas de las Escrituras; y
(6) afirmamos juntos como una declaración exacta de la verdad bíblica el Credo Apostólico.
La tercera parte tocaba el tema de la esperanza confirmada en Mateo 28:20 y Juan 13:34-35. Esta parte estuvo seguida por la cuarta parte que se trató de una búsqueda común. El documento reconoció que había diferencias entre los evangélicos y católicos.
Entre ellos nombraba diez áreas de disputa como la de:
la “Sola Escritura”,
los sacramentos y ordenanzas, y
la devoción a la Virgen Maria.
Dentro de este apartado también reconoció que había diferencias entre los evangélicos mismos como los bautistas, los pentecostales, y los calvinistas, de los cuales no aparecían soluciones fáciles. Pero ellos afirmaron que debería haber más dialogo tal como estaba sucediendo entre los evangélicos y los católicos romanos.
En la quinta parte habló de trabajar juntos para proteger y defender los derechos humanos y la libertad religiosa. Dijo que debería haber más cooperación entre ambos partes para luchar contra:
el aborto,
la eutanasia,
la pornografía,
la violencia,
la intolerancia religiosa en los medios de comunicación, y
la falta de educación moral en los colegios públicos.
La sexta parte estuvo titulada “Nos Damos Testimonio Juntos”. En esta parte era quizás la más conflictiva y la más mal entendido por parte de los medios de comunicación. Ellos habían enfocado en el documento con cierto aire. En la página 22 dice:
“Es comprenhensible que cristianos quienes dan testimonio al Evangelio intentan persuadir a otros que sus comunidades y tradiciones son mas de acuerdo con el Evangelio. Hay una distinción necesaria entre evangelizando y lo que se llama hoy proselitismo o <robar ovejas>. Nosotros condenamos la práctica de reclutar personas de otras comunidades con el fin de engrandecer una institución o denominación. Al mismo tiempo, nuestro compromiso a plena libertad religiosa nos obliga a defender la libertad legal a ganar prosélitos en el mismo momento que pedimos que los cristianos se abstengan de tal actividad.”
Estas palabras fueron interpretadas por muchos con el sentido de que los evangélicos tendrían que dejar de evangelizar a los católicos y viceversa. Obviamente si esa fuera la interpretación correcta, los que trabajan con AGAPE o son miembros o misioneros con las Asambleas de Dios o la UEBE (Bautistas en Epaña) tendrían que dejar de evangelizar sus familias y sus vecinos católicos. Pero eso era así según ciertos firmantes.
Para aclarar el asunto, este servidor escribió a varios firmantes y recibió respuestas de parte de Dr. Bill Bright y de Dr. Larry Lewis negando tal interpretación. Ellos insistían en que estuvieran dedicados a predicar al evangelio a todos, sean protestantes, católicos, judíos o cualquier otra persona. Su labor y la labor de sus obreros no era “robar ovejas” sino predicar a Cristo. Así que, después de que uno reciba a Cristo, como Señor y Salvador, ellos le exhortarían que buscara una Iglesia dónde Cristo fuera honrado como Señor y la Biblia estaba proclamada como Palabra de Dios. Además, los dos admitían que aquel documento no fuera un acuerdo formal con el Vaticano de Roma, sino sólo un acuerdo informal con unos pocos católicos signatarios.
Ahora después de la firmacion del documento en 1994, Mark Noll escribió un libro en 2004 con el titulo: Is the Reformation Over? (¿Se ha sucedido la Reformacion?, Baker academia, 2005) y él volvió al interés en el tema otra vez. En la revista cristiana, BIOLA Connections, del verano 2007, aparece un “interview” con Robert Saucy, un ex profesor que enseñaba en La Escuela de Teología Talbot por 45 años. El dice en un reportaje lo siguiente:
(1) El cree que es bueno tener un dialogo entre Católicos y Evangélicos. Pero no está a favor en dar la imagen que estemos de acuerdo en todo. Por ejemplo, Sí, estamos salvados por la gracia a través de la fe, pero el documento no ponía “por fe sola”, lo cual es muy esencial para los protestantes pero no a los católicos.
(2) Está un poco preocupado que algunos protestantes pudieran cambiarse y llegar a ser católicos sin saber los problemas teológicos.
El Catolicismo Romano es muy atractivo a los protestantes pero sólo con los que miran ciertas cosas sin saber otras cosas que existen. La Reforma enseñaba tres cosas importantes:
(1) “Sola Escritura”, lo cual la Iglesia Católica Romana cree que sólo la Iglesia Católica interpreta a las Escrituras.
(2) Según los protestantes, la iglesia no es una extensión de la encarnación de Cristo. Pero la Iglesia Católica Romana cree que sí. Y
(3) en cuanto a la salvación, los protestantes creen que uno es salvo por la fe en creer que Jesús pagó con su sangre el precio por el pecado y al creer en él, estás salvado. Mientras la Iglesia Católica Romana cree que es un proceso.
Todo depende de cada paso como el bautismo, la comunión primera, los sacramentos, la ultima unción, etc. Y aun, haciendo todo que la Iglesia le dice, no está seguro si fueras salvo o no. Y por ultimo, Robert Saucy tiene suspiciones de que la Iglesia Católica Romana cree que el Dios de los Católicos, Judíos y Musulmanes es el mismo Dios. En esto no está de acuerdo en nada. Alá no es el mismo que YAHWEH.
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