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La Trinidad-Dios
Estudios por el profesor Delmar IntVeld
El Padre – Padre es el nombre bíblico dado a la primera persona de la Trinidad y como tal expresa precisamente la relación que existe entre él y la segunda persona, su Hijo Jesucristo, y entre él y sus hijos espirituales a quienes ama como cual padre a su propio hijo (Juan 1:14; Mateo 5:45).
El Hijo – Jesucristo, la segunda persona de la Trinidad, es el Hijo de Dios, quien para ser el Salvador del mundo se manifestó en carne humana, concebido por milagro en el vientre de la Virgen María y nacido de ella como su hijo primogénito, siendo a la vez en el misterio de su persona verdadero hombre y verdadero Dios (Juan 1:14; Lucas 1:26-38; 2:1-7; Filipenses 2:5-8).
Al final de su vida, después de haber pasado sus días sin pecado (Hebreos 4:14), se ofreció a sí mismo en la cruz del Calvario como sacrificio por los pecados del mundo y así fue el autor y mediador de la eterna salvación (Hebreos 10:12; I Pedro 2:24).
Muerto por nuestros pecados, el Padre lo resucitó corporalmente en triunfo sobre la muerte y lo exaltó a su diestra donde actualmente él intercede por su pueblo (Hebreos 1:3; I Juan 2:1; Hebreos 7:24, 25).
El Espíritu Santo – la tercera persona de la Trinidad, se manifiesta entre los hombres como la presencia y poder de Dios operando en sus vidas para:
(1) Llevar a los pecadores a un verdadero arrepentimiento y conmoverles depositar su fe en Jesucristo como su único y suficiente Salvador (Juan 16:7-14; I Corintios 12:3).
(2) Guiar al conocimiento de toda verdad, iluminando el entendimiento del creyente cuando atiende a la Palabra de Dios – leyéndola, estudiándola o escuchando su predicación (Juan 14:26; 16:13).
(3) Llenar a los creyentes con poder divino y santidad (Hechos 1:8; Efesios 3:16).
(4) Dirigir las actividades de la Iglesia de Jesucristo, dotando de dones espirituales a los fieles para su mutua edificación en la verdad del evangelio (Juan 16:7-14; Hechos 2:1-4; Romanos 8:1, 13 y 14; I Corintios 12).
El Espíritu Santo como una persona.
(1) Se usa el género masculino <<él>> aunque <<Espíritu>> es neutro en el Griego.
(2) <<Consolador>> no se puede aplicar a una influencia abstracta, sino a una persona.
(3) Su nombre se menciona con otras personas.
Hechos 15:28 Nos pareció bien al Espíritu Santo y a nosotros no imponerles a ustedes ninguna carga aparte de los siguientes requisitos:
Nosotros se refiere a los cristianos.
Juan 16:14 Él (el Espíritu de verdad) me glorificará (a Cristo) al tomar de lo mío y dárselo a conocer a ustedes.
Juan 17:4 Yo te he glorificado en la tierra al llevar a cabo la obra que me encargaste.
Cristo glorificó al Padre en cumplir su obra en la tierra. El Espíritu Santo glorifica a Cristo al tomar su verdad y darla a nosotros (Mateo 28:29; II Corintios 13:14; Judas 19-21; I Pedro 1:1, 2).
(4) Hace cosas que corresponden a una personalidad (I Corintios 2:10; Génesis 1:2 6:3; Lucas 12:12; Juan 3:8; 6:8; Hechos 2:4; 8:29; 10:19, 20; 13:2; 16:6, 7; Romanos 8:11, 26; 15:19; I Corintios 12:8-11; II Pedro 1:21; I Pedro 1:2).
El Espíritu Santo: escudriña, conoce, habla, testifica, enseña, revela, convence, manda, contienda, mueve, ayuda, guía, crea, recrea, santifica, inspira, hace intercesión, manda asuntos de la Iglesia, hace milagros, levanta los muertos.
(5) Responde como una persona a los hechos de otros.
Isaías 63:10 Pero ellos se rebelaron contra el SEÑOR y ofendieron su Espíritu Santo; por eso se volvió enemigo de ellos y les hizo la guerra.
Mateo 12:31 Por eso les digo que todo pecado y toda blasfemia se les perdonarán a los hombres, pero la blasfemia contra el Espíritu no se perdonará.
Hechos 5:3, 4, 9; 7:51 —Ananías —le dijo Pedro—, ¿Cómo es que ha llenado Satanás tu corazón de tal manera que le has mentido al Espíritu Santo y te has quedado con parte del dinero que recibiste por el terreno? ¿Acaso no era tuyo antes de venderlo? Y una vez vendido, ¿no estaba el dinero a tu disposición? ¿Cómo se te ocurrió hacer algo semejante? No has mentido a los hombres sino a Dios.
Efesios 4:30 No entristezcan al Espíritu de Dios, con el cual fueron sellados para el día de la redención.
El Espíritu Santo tiene que ser una persona porque puede ser resistido, entristecido, enojado, blasfemado y únicamente una persona puede ser insultado o ofendido.
También muestra sus emociones de amor y sentimiento.
Romanos 15:30 Les ruego, hermanos, por nuestro Señor Jesucristo y por el amor del Espíritu, que se unan conmigo en esta lucha al orar a Dios por mí.
Romanos 8:26, 27 De la misma manera, el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad. No sabemos qué debemos pedir, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos que no se pueden expresar con palabras. Y aquel que examina los corazones sabe cuál es el sentir del Espíritu, porque el Espíritu intercede por los santos conforme a la voluntad de Dios.
(6) Se manifiesta en forma visible pero aparte o distinto del Padre e Hijo.
Mateo 3:16, 17 Tan pronto como Jesús fue bautizado, subió del agua. En ese momento se abrió el cielo, y él vio al Espíritu de Dios bajar como una paloma y posarse sobre él. Y una voz del cielo decía: <<Este es mi Hijo amado; estoy muy complacido con él>>.
También en Lucas 3:21, 22:
(7) Muchos pasajes quedarían sin sentido si el Espíritu Santo realmente fuera solamente un poder o una influencia. Tendrían una redundancia.
Hechos 10:38 Ungió Dios a Jesús de Nazaret con el Espíritu Santo y con poder. (Sería con poder y poder)
Romanos 15:13 Que el Dios de la esperanza los llene de toda alegría y paz al confiar ustedes en él, para que rebosen de esperanza por el poder del Espíritu Santo. (Sería poder del poder)
Romanos 15:19 Por el poder de señales y milagros, mediante el poder del Espíritu. (Sería poder del poder)
I Corintios 2:4 No expresé mi mensaje y mi predicación con palabras sabias y persuasivas sino con demostración del poder del Espíritu. (Sería poder del poder)
(8) Se distingue el Espíritu Santo de sus dones.
I Corintios 12:4, 7, 8, 11 Hay diversos dones, pero un mismo Espíritu… A cada uno se le da la manifestación del Espíritu para el bien de todos. A unos se les da por el Espíritu el mensaje de sabiduría; a otros, por el mismo Espíritu, el mensaje de conocimiento… Todo esto lo hace un mismo y único Espíritu, quien da a cada uno según él determina.
Se ve también que el Espíritu tiene una voluntad.
Enseñanzas Básicas de Nuestra Fe – Estudios por el profesor Delmar IntVeld
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