Hebreos 9 explica el arreglo legal celestial para que seamos perdonados. El perdón tuvo que ser declarado – legalmente – por Dios a través de Su sistema de justicia, o Dios no habría sido justo – y nunca habríamos tenido la oportunidad de ser salvos.
Dios, siendo santo, no puede aceptar la pecaminosidad en su Reino, por lo que toda la humanidad fue condenada para siempre. No nacemos asesinos (¡!) sino que nacemos pecadores. Y una vez nacidos, vivimos un poco y demostramos que realmente no podemos – ¡no pecar!
Jesús es El Camino. Dios proveyó un camino para que fuéramos perdonados y hechos justos con Dios. Jesús fue ese camino. Jesús es El Camino. Hebreos 9:24-28 explica cómo Cristo fue el que se sacrificó voluntariamente para cumplir con los requisitos legales para poder perdonarnos:
24 Pues Cristo no entró en un lugar santo hecho por manos humanas, que era solo una copia del verdadero, que está en el cielo. Él entró en el cielo mismo para presentarse ahora delante de Dios a favor de nosotros; 25 y no entró en el cielo para ofrecerse a sí mismo una y otra vez, como lo hace el sumo sacerdote aquí en la tierra, que entra en el Lugar Santísimo año tras año con la sangre de un animal. 26 Si eso hubiera sido necesario, Cristo tendría que haber sufrido la muerte una y otra vez, desde el principio del mundo; pero ahora, en el fin de los tiempos, Cristo se presentó una sola vez y para siempre para quitar el pecado mediante su propia muerte en sacrificio. 27 Y así como cada persona está destinada a morir una sola vez y después vendrá el juicio, 28 así también Cristo fue ofrecido una sola vez y para siempre, a fin de quitar los pecados de muchas personas. Cristo vendrá otra vez, no para ocuparse de nuestros pecados, sino para traer salvación a todos los que esperan con anhelo su venida.
El sistema judaico del Antiguo Testamento exigía que un sacerdote ofreciera sacrificios anuales. Pero Cristo, el perfecto Cordero de Dios, murió una vez – por todos nosotros, para que pudiéramos ser salvados (v.26): “pero ahora, en el fin de los tiempos, Cristo se presentó una sola vez y para siempre para quitar el pecado mediante su propia muerte en sacrificio”.
Juan 1:29
Al día siguiente, Juan vio que Jesús se le acercaba y dijo:
«¡Miren! ¡El Cordero de Dios,
que quita
el pecado del mundo!
El sacrificio fue hecho, la pena fue pagada – ahora ¿qué harás con la oferta de salvación de Dios a través de la fe en Cristo?
Juan 3:3
Jesús le respondió:
—Te digo la verdad,
a menos que nazcas de nuevo,
no puedes ver el reino de Dios.
Basado en el artículo Legally Damned – Legally Forgiven, publicado en inglés: 18 de octubre, 2016.
PARA MÁS:
Así que, Dios envió a Su Hijo a la tierra. ¿Sabes por qué? (publicado en inglés: So, God sent His Son into the world. Do you know why?)
Deja un comentario