Del libro, Mark Mittelberg, Lee Strobel y Hill Hybels, Volverse Un Cristiano Contagioso, Zondervan Pub., 1995.
- ¿No todas las religiones enseñan básicamente las mismas cosas pero usan diferentes nombres para Dios?
Cuando miras bajo la superficie, descubrirás que hay mayores diferencias entre las religiones, incluyendo contradicciones sobre quien es Dios. Por ejemplo algunas formas de Budismo ni siquiera enseñan que hay un Dios el Hinduismo enseña que Dios existe y que todo es parte de El.El Cristianismo enseña que Dios existe, pero que esta separado de todo lo que ha creado. Estas son definiciones exclusivas que no pueden ser descriptivas del mismo Dios.
Otras religiones generalmente ven a Jesús como un ser con mas o menos el mismo nivel que otros profetas de Dios no como lo que El afirmaba ser la única encarnación de Dios que vino a la tierra como hombre (Juan 1:1, 14; Juan 8:24; Fil. 2:5-11).
Otras religiones niegan la enseñanza bíblica de que la misión fundamental de Cristo fue dar su vida en la cruz como pago por nuestros pecados (Mateo 20:28). También pasan por alto el hecho de que de todas las religiones en la historia con líderes que afirman ser profetas de Dios, sólo Jesús respaldó su afirmación resucitando de la muerte.
En los días del viejo y nuevo testamento existían otras religiones, y no eran bien miradas por los escritos bíblicos como alternativas aceptables (Números 25:3-5; 1 Reyes 18:16-40; 1 Cor. 10:20).
- Con tal de que cada persona sea genuinamente sincera, ¿qué importa lo que crea?
El problema es que creer algo sinceramente no lo hace cierto. Tú puedes ser sincero, pero estar sinceramente equivocado. La gente que sube a un avión que luego el avión se estrella puede ser sincera en sus creencias de que estará a salvo, pero su sinceridad no cambiaría lo que le va a ocurrir más tarde. Nuestras creencias, no importa cuan profundamente arraigadas están, no influyen la realidad.
Esto es verdad en todas las áreas de la vida. Creer sinceramente que es seguro cruzar la carretera no te ayuda si hay tráfico en camino. Pensar que la velocidad máxima es 160 Km. /hr. cuando es 120 km/hr. no te prevendrá de conseguir una multa de tráfico. Y aferrarte fuertemente a tus creencias sobre Dios no las aseguran ciertas.
La sinceridad no cambiaría los hechos o las consecuencias para las personas en situaciones como las masas suicidas del culto de Jim Jones en Guayana en los principios de 1980 o del culto de David Koresh en Waco, Texas.
Lo que cuenta no es la sinceridad de nuestra fe, sino el objeto de nuestra fe. Necesitamos preguntarnos, “¿es realmente digno de confianza en lo que estoy confiando?” Necesitamos tener en cuenta el consejo dado en la Biblia en 1 Tes. 5:21: “Examinad lo todo; retened lo bueno.”
- ¿No es una estrechez mental para los cristianos pensar que ellos tienen la razón en que todos los demás están equivocados?
No es una estrechez mental si tu has investigado y visto que el cristianismo prueba por si mismo que es falible en maneras de que otras religiones y puntos de vista no lo hacen.
La sabiduría nos conduce a seguir un rumbo de acción por encima de muchas otras opciones. Por ejemplo, cuando nuestro doctor nos receta una medicación para ayudarnos a ponernos bien, no es una estrechez mental aceptar su consejo, aun cuando sabemos que hay sanadores psíquicos y curanderos tribales que nos recomendaron diferentes proposiciones. La pregunta es ¿Quién tiene las credenciales en que podamos confiar?
Recuerde que nosotros no somos realmente los protagonistas de este argumento. Fue Jesús mismo quien dijo claramente en Juan 14:6, “Yo soy el camino, la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mi.”
Cuando alguien condene nuestros puntos de vista porque son exclusivos, esa persona está, en este momento, haciendo la misma cosa. Está condenando y excluyendo nuestras creencias. La pregunta importante es si nosotros tenemos una buena razón para aceptar nuestra posición por encima de todas las demás opciones.
Evita confundir la verdad y la tolerancia. Son dos cosas distintas. Debemos aferrarnos fuertemente a lo que creemos y comunicarlo claramente, pero también apoyar los derechos de otros estar en desacuerdo con nuestro punto de vista.
- ¿Qué credenciales apoyan las pretensiones del cristianismo? ¿Hay alguna buena evidencia para apoyarlo?
Había profecías detalladas escritas acerca de Jesús ciento de años antes de su nacimiento. Ninguna persona corriente podría realizar esto pero El se cumplió con cada una de ellas.
Los ejemplos incluyen a Isaías 53, que predijo casi 800 años previos a los acontecimientos que el Mesías seria desecho, que El “Llevaría nuestro dolor”, que El pagaría por nuestros pecados (dice el versículo 5 que El “herido fue por nuestros rebeliones.” Esto fue cientos de años antes de que la crucifixión hubiera sido inventada como método de ejecutar criminales y que volvería a la vida – versículo 11).
Y hay otras evidencias, como sus milagros, que han sido documentados. El no solo llego a los más altos patrones del moral, pero también los vivió. El predijo que volvería a la vida después de morir en la cruz ¡Y lo hizo!
Los hechos de Jesús eran tan completamente consistentes con sus enseñanzas de alta moral que cuando sus oponentes querían acusarle de pecado, tenían que inventar cosas que no eran verdad. Por ejemplo en el “juicio” antes de la crucifixión, ellos dependieron mucho de falsas acusaciones para apoyar su acusaciones en contra de El (Marcos 14:56-59). Jesús decía, “Quién de vosotros me redarguye de pecado?” (Juan 8:46). Los propósitos que tenían eran claros de acusarle de pecar.Pero tenían un problema, ellos no podrían acusarle y nadie a través de la historia ha sido capaz de acusarle del pecado tampoco. Sólo Jesús ha sido libre de culpa.
Los milagros de Jesús fueron hechos abiertamente y a pleno día. Fueron observados tanto por los que lo apoyaban igual por sus detractores. Tan convincente fue la evidencia que sus oponentes nunca pusieron en duda lo que les había dicho. Sólo la conveniencia de cómo lo había hecho. Por ejemplo, cuando curó la mano seca de un hombre, le criticaron por hacerlo en el día de reposo (Mateo 12:9-14). Su misma acusación de Jesús probaba que El había llevado a cabo el milagro, lo que era evidencia de que El era lo que decía que era: El Hijo de Dios (Juan 10:38).
El milagro más grande de Jesús, en dónde se jugó lo que afirmaba, fue de su resurrección (Juan 2:19-22). El registro de la historia muestra que realmente se levantó de la muerte. Sus discípulos, que dudaban en el principio, le vieron y hablaron con El en varias ocasiones después de la resurrección. Sólo esto justifica la manera en que cambiaron el esconderse temerosamente en las sombras a testificar valientemente en público, incluso cuando significaba arriesgarse y finalmente perder sus vidas.
Fue una aparición de este mismo Cristo resucitado lo que volvió a Saulo, el enemigo del cristianismo, en Pablo, el más grande misionero de Cristo que haya existido. También la resurrección de Jesús es apoyada por el hecho de que Su cuerpo desapareció de Su tumba tan guardaba cuidadosamente por los soldados romanos. Los líderes judíos y romanos hubieran hecho callar las habladurías de un Mesías resucitado si hubieran sidos capaces de asegurar a la gente que estaba todavía muerto. Pero no pudieron. Jesús resucitó y no había cuerpo para encontrar.
- ¿Qué te hace estar tan seguro de que la Biblia es verdad? Tiene tantos autores, tantas traducciones, y fue escrita hace tantos años- ¡Tienen que haber errores!
La primera parte de su ilustración muestra lo que podemos hacer si no tenemos una respuesta concisa que nos sepamos al dedillo o cuando no nos parece al tiempo y lugar adecuados. Está bien remitirse a fuentes fidedignas de información, como un profesor o libro creíble. O si es preferible, decirles que nos gustaría estudiar la pregunta y hablar con ellos más sobre el tema dentro de unos días. Nuestro amigo está más preocupado en conseguir una buena respuesta que una instantánea.
Una de las maneras más efectivas de ayudar a alguien en ver que la Biblia es realmente la Palabra de Dios es conseguir que la lean por si mismos. Les
Ayudará librarse de los estereotipos que conciernen al contenido, mostrarles cuan revelantes son sus enseñanzas, provee un ambiente en el que el Espíritu Santo puede trabajar poderosamente para convencerles de su necesidad y enfrentar la verdad. Generalmente es una buena idea dirigirles hacia el Nuevo Testamento como un punto para empezar leer.
Si realmente hay un Dios como la Biblia describe, entonces no sería problema para El, el guiar a muy diferentes escritores de diferentes países y
Culturas para registrar fielmente su mensaje. Eso, de hecho, es lo que la Biblia afirma que El hizo (2 Pedro 1:20-21). Una investigación de la Biblia confirma esto por sí sólo. La consistencia del mensaje de Génesis hasta el libro de Apocalipsis es asombrosa.
La mayoría de lo que la gente llama “contradicciones” es fácilmente explicable con un poco de estudio y reflexión. Más adelante el hecho de que hay diferencias superficiales en la manera en que los testigos bíblicos describen lo que vieron es una nueva evidencia de que sus testimonios son fiables.
En otras palabras, no hicieron esfuerzo en “hacer concordar sus historias”. Sólo contaron lo que pasó como lo vieron. También una comparación de las “diferentes traducciones” mostrará que ellos generalmente utilizaban diferentes palabras para decir las mismas cosas.
Jesús mismo avaló la Biblia como la “Palabra de Dios” (Mateo 15:6). Repeditamente, apeló a su autoridad diciendo “escrito está”. En el Sermón del Monte, Jesús dijo, “la Escritura no puede ser quebrantada”. La mayoría de la gente dice que Jesús fue como mínimo un buen profesor, debemos recomendarles que se tomen en serio lo que enseño concerniente a la Biblia.
La Biblia está compuesta de 66 libros separados, escritos en un período de 1.500 años por más de 35 autores diferentes. Estos autores provinieron de medio ambientes muy variados y escribieron sobre muchas diferentes temas. Algunos de estos autores fueron reyes, médicos, maestros, granjeros, pescadores y escribieron acerca de la Ley, de historia, ciencia, poesía, profecía, etc.
Aun así estos libros encajan perfectamente los unos con los otros en una armonía total, tan perfectamente como las partes del cuerpo humano. El que 35 autores con antecedentes tan variados escribieran sobre temas tan diferentes en un periodo de 1.500 años en una armonía absoluta es matemáticamente imposible. No obstante, tenemos la Biblia. Dios nos da la respuesta. Los santos hombres de Dios escribieron al ser guiados por el Espíritu Santo.
La Biblia en el original es completamente exacta. Sus profecías han predicho cosas que se cumplieron más tarde en el más infinito detalle (Lea Salmo 22: 1, 16 – 18).
¿Qué es lo que describe? Describe a Jesús en la cruz. Es la crucifixión descrita en detalle. Sus manos y pies clavados y el sorteo de su ropa. Eso fue lo que David escribió 800 años antes de Cristo. Y lo que es más sorprendente es que en ese tiempo ellos no sabían nada acerca de crucifixiones. Los romanos no usaron la crucifixión hasta 200 años antes de Cristo.
David fue guiado a escribir por el Espíritu Santo pero en realidad no sabía lo que estaba escribiendo en ese momento. En el Antiguo Testamento existen 300 profecías por este estilo, o ramificaciones de la profecía, tales como que Cristo habría de nacer en Belén, seguidores, por 30 piezas de plata y no por 29 que las 30 piezas de plata serían usadas para comprar el sepulcro del alfarero.
Esto ha sido presentado de la siguiente manera: Las probabilidades de que solamente ocho de estas 300 profecías fueran cumplidas por una persona son de una décima séptima potencia.
Eso no le dirá mucho, a menos que sea un matemático, pero permítame describirlo de esta manera: Supóngase que usted fuera a cubrir el estado de Texas con 60 centímetros de moneda de plata. Tome una de esas monedas, márquela y arrójela de nuevo en el montón, mézclela con el resto y entonces tapar a los ojos con una venda un tejano y haga que se vaya a cualquier lugar que desee y recoja una moneda de plata.
Las probabilidades de que tenga la moneda que usted ha marcado son las mismas que las probabilidades de que cualquiera de estas profecías fueran cumplidas en una sola persona. No obstante, todas las 300 profecías fueron cumplidas por Jesucristo.
La veracidad de la Biblia está fuertemente apoyada por la historia, geografía, arqueología y ciencia. Ningún otro libro goza de este tipo de amplio apoyo. Los estudios en este área han hecho cambiar de opinión a muchos escépticos que dudaban de la validez del cristianismo, incluyendo a Lee Strobel (puede leer los detalles en su libro de lo que lo convenció a cambiarse de ser un ateo a ser un cristiano). Para más información se puede leer
Cuando los Escépticos Preguntan por Norman Geisler y Ron Brooks y
Enciclopedia de las Diferencias de la Biblia por Gleason Archer.
- ¿Cómo sabes que Dios existe?
La investigación científica señala al orden en el universo, y eso es precisamente adaptado para la vida humana. Uno de muchos ejemplos de esto es que incluso la más insignificante variación en la inclinación del eje de la tierra originaría tanto congelación o nos quemaría.
Vemos orden en el cuerpo humano. Sabemos que algo tan complejo como un reloj de pulsera tenía que haber sido hecho por un diseñados inteligente. Pero la mano que lleva el reloj es mucho más compleja que el reloj. Por esta razón, la mano tendría que ser hecha por un diseñador inteligente.
Historia escrita – Dentro y fuera de la Biblia (incluyendo judíos, romanos, griegos y otros) apoyan los acontecimientos milagrosos que rodean la vida de Jesús. Los ejemplos incluyen sus profecías cumplidas, sus milagros, el asombroso milagro de resucitar al tercer día después de ser crucificado.
Se puede dar otros argumentos como que Dios es la única causa para la existencia del universo (de lo contrario, el universo es eterno o se produjo de la nada). O Dios es el único origen de moralidad entre los humanos (de lo contrario, nada está realmente bien o mal, sólo tenemos lo que prefijemos).
La tierra gira a 1.600 Kms. por hora. Si lo hiciera a 160 Kms. por hora, los días y las noches serían 10 veces más largas y nuestro planeta se quemaría y helaría alternativamente. La vegetación no podría existir.
Si la tierra fuera tan pequeña como la luna, el poder de la gravedad no sería suficiente para mantener la atmósfera y no podríamos respirar. Si fuera tan grande como Júpiter, Saturno o Urano, la gravedad sería tan densa que haría que el movimiento humano fuera casi imposible.
Si nuestro planeta estuviera tan cerca del sol como Venus, el calor sería insoportable. Si estuviera tan lejos como Marte, tendríamos nieve e hielo todas las noches, aún en las regiones más cálidas.
Si los océanos tuvieran la mitad de su tamaño, solamente tendríamos ¼ de la precipitación pluvial que tenemos ahora. Si los océanos fueran solamente 1/8 más grandes, el promedio de la precipitación pluvial sería cuatro veces mayor de lo que es y la tierra sería un pantano inhabitable.
El agua se solidifica a cero grados. Si los océanos estuvieran sujetos a esa ley, resultaría desastroso. La cantidad de deshielo en las regiones polares sería desproporcionada. El hielo se acumularía a través de los siglos. Para prevenir esto, el Señor puso sal en el océano, para alterar el punto de congelamiento.
PARA MÁS:
Ravi Zacharias, ¿Puede un hombre vivir sin Dios?
Hugh Ross, El Creador y el Cosmos
J.P. Moreland, Escalando la Ciudad Secular
- Si existe realmente un Dios amoroso y poderoso ¿Por qué no hace algo con toda la maldad del mundo?
Esta es una pregunta difícil contestar. Una cosa que me ha ayudado es la compresión de que la maldad no está sólo fuera. Hay maldad en nosotros también. Si Dios decidiera librarse de toda la maldad, Él tendría que destruirnos también.
Dios nos creó con la habilidad de amar y seguirle o rechazarle y alejarnos de El. Elegimos rebelarnos contra Él y seguir nuestras inclinaciones. Romanos 3:23 explica que “todos pecaron y están destituidos de la Gloria de Dios”. Romanos 6:23 añade, “ la paga del pecado es muerte…”
Sabiendo que todos nosotros somos parte de “la maldad” de la que la gente dice “Dios debería hacer algo” – nos da una nueva e importante perspectiva.
La Biblia dice que Dios juzgará un día toda maldad. Pero ahora, nos está dando pacientemente una oportunidad para volvernos a Él y recibir el perdón y vida que nos ofrece.
Dios promete que Él pondrá un fin a la maldad. Pero no lo ha hecho todavía. Él está esperando. 2 Pedro 3:9 dice, “es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento.” Pero no debemos tomar su paciencia como una garantía. No hay manera de saber cuánto tiempo tendremos para recibir su misericordia y su perdón.
Contrariamente a lo que podíamos pensar, la existencia de la maldad debería llevarnos hacia la creencia en Dios, no hacia un alejamiento de Él. Si no hubiera Dios, entonces no habría un patrón de lo que está mal o bien. Habríamos comenzado a existir por casualidad y lo que hiciéramos no tendría significado o valor moral, positivo o negativo. Alguna gente afirma creer eso, pero es imposible para ellos sostener consistentemente esa creencia.
Tan pronto como protestan de que alguien fue “incorrecto” con ellos o que alguien es “injusto”, ellos traicionan su propia creencia.
- ¿Qué pasa con la gente inocente que sufre como niños pequeños? ¿Por qué Dios no hace algo para ayudarles?
Evite dar respuestas simplistas a sus complicadas preguntas. Muchas veces la gente las formula desde su propio dolor más que de un simple deseo de oir una respuesta racional. A menudo su necesidad es de una asistencia cristiana, no una respuesta cristiana.
Para Dios, el sufrimiento causado por la maldad no es alguna idea abstracta. Recuerde que Dios vino a la tierra como hombre con el propósito de llevar nuestra maldad y su castigo sobre sí cuando murió fue la cruz. En 1 Pedro 2:24 dice, “Quien llevó el mismo nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, para que nosotros, estando muertos a los pecados, vivamos a la justicia; y por cuya herida fuisteis sanados”. La verdad es que Cristo sufrió la maldad en maneras que ninguno de nosotros lo haría jamás.
En una época en que tantas religiones y filosofías están tratando de convencernos que las cosas están yendo de mejor en mejor, o que la maldad no es real, es alentador ver lo realista que es la Biblia sobre el mundo en que nos rodea. Sólo hace falta mirar las noticias para ver lo que Jesucristo dijo en Juan 16: 33, “En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.” Sufrir es ciertamente un problema, pero vemos la credibilidad del cristianismo en la precisión y la honestidad que describe ese problema.
La mayoría de la maldad del mundo es el resaltado de gente que hace daño a otra gente ¡Algo que Dios dice que NO HAGAMOS!
Usado con permiso:
Mark Mittelberg, Lee Strobel y Hill Hybels, Volverse Un Cristiano Contagioso, Zondervan Pub., 1995.
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