FamilySearch tiene el compromiso de conservar los registros históricos que tienen relación con la familia humana. A partir de 1894, hemos adquirido registros genealógicos de todo el mundo. Las copias en microfilme (y más recientemente las imágenes digitales) de esos registros se almacenan en una bóveda de alta tecnología excavada en un bloque de granito en una montaña cerca de Salt Lake City, en los Estados Unidos. Para evitar el deterioro de esas valiosas colecciones, no se permite el acceso al público en general dentro de la bóveda.