Nunca ha habido nada igual. Y nunca volverá a haber nada igual, nunca. El peor de todos los males: Ir al infierno y estar allí … para siempre.
Un lugar para los hipócritas
Hay un lugar asignado para los “hipócritas”. Jesús dijo: ese lugar es para los que piensan que están sirviendo fielmente al Maestro, pero no lo hacen. No son fieles ni honestos. El hipócrita es el que “come y bebe con aquellos quienes habitualmente están borrachos”.