No soy sólo humano, después de todo, puesto que nací de nuevo a una nueva vida en Cristo,. Nunca más seré sólo humano. Por medio de Cristo, ahora soy una nueva creación de Dios, y Él, por el Espíritu Santo, tiene un lugar especial dentro de mi alma. Como ningún otro “dios” pudo haberlo hecho, […]
Una vida sin vigilancia
No importa quién eres… no es sabio para ti ser el Cordero Tonto, “solo en prados verdes arrodeado por forestales gigantes donde lobos escondidos te acercan”.