* El payaso para Cristo. La foto del año 2016 es de Al-Basha, un cristiano sirio que actuó de acuerdo con sus creencias, y fue asesinado el martes 29 de noviembre de 2016 en un presunto ataque del régimen de Asad o del gobierno Ruso con misiles balísticos en el vecindario de Mashhad, en el lado oriental asediado de la Ciudad de Alepo. Se vestía de payaso para servir a los niños – para Cristo. Al-Basha fue director del centro Space for Hope, una iniciativa cristiana local que sirve en las zonas de oposición devastadas por la guerra de Siria. – Foto de Ahmad al-Khatib, un activista de los medios de comunicación en Alepo en 2016. Ve los artículos relacionados: Being Jesus “With Skin On” for Children, Actually act on what you know.
Seas quien seas, sea cual sea tu color, “rojo y amarillo, blanco y negro …” (quizás todos deberíamos responder: “color pastel”), donde quiera que vivas, Dios mismo reside en el verdadero creyente. ¿Está Él en ti?
Qué asombroso misterio: ese Dios Todopoderoso elegiría de alguna manera entrar en Su creación. Él no se “rebaja” ni condesciende ni se inclina para hacerlo. Amarnos así está en Su misma naturaleza.
Dios es amor y humildad, en el mismo nivel con Su Omnipotencia y Genialidad sin igual. Lo que es tan incognoscible es que Él escogería amarnos “mientras aún éramos pecadores” en rebelión contra Él. ¡Gracia asombrosa!
Romanos 5:8
Pero Dios mostró el gran amor que nos tiene al enviar a Cristo a morir por nosotros cuando todavía éramos pecadores.
Mateo 11:19
El Hijo del Hombre, por su parte, festeja y bebe, y ustedes dicen: “¡Es un glotón y un borracho y es amigo de cobradores de impuestos y de otros pecadores!”. Pero la sabiduría demuestra estar en lo cierto por medio de sus resultados».
1 Timoteo 1:15-17
15 La siguiente declaración es digna de confianza, y todos deberían aceptarla: «Cristo Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores», de los cuales yo soy el peor de todos. 16 Pero Dios tuvo misericordia de mí, para que Cristo Jesús me usara como principal ejemplo de su gran paciencia aun con los peores pecadores. De esa manera, otros se darán cuenta de que también pueden creer en él y recibir la vida eterna. 17 ¡Que todo el honor y toda la gloria sean para Dios por siempre y para siempre! Él es el Rey eterno, el invisible que nunca muere; solamente él es Dios. Amén.
En el momento de la salvación:
en un abrir y cerrar de ojos, el nuevo creyente pasa
de la muerte a la vida,
de la condenación a la no condenación,
de un destino en el Infierno a un destino en el Cielo,
de ser sólo un hombre a ser un hijo de Dios.
– Fuente: Ese momento preciso
Debido a lo que está escrito, los creyentes pueden saber que ya tenemos Su vida eterna (1 Juan 5:13). Comenzamos nuestra vida eterna en Cristo cuando creímos por primera vez (no “más tarde” cuando Él nos lleva al cielo y nos da nuevos cuerpos …). No debes preguntarte “si …”, no debes trabajar con temor para asegurarte de que la ganes, no debes tener miedo de perderla, no debes dudar de que eres Suyo.
Somos suyos porque Él nos salvó. Dios lo tiene escrito en su libro, la Biblia:
1 Juan 5:13
Les he escrito estas cosas a ustedes,
que creen
en el nombre del Hijo de Dios,
para que sepan
que tienen vida eterna.
Esta salvación eterna nos es otorgada por nuestro Dios eterno, en ese mismo momento en que nos apartamos de nosotros mismos y nos volvemos a Él en arrepentimiento. Un profesor de idiomas señala que esto está escrito en tiempo presente basado sobre algo pasado, no en un futuro vago. Como se dice en los negocios, “es un trato hecho”.
La salvación en Cristo no es algo que hacemos. Es algo que Dios hace. Dios nos lo hace a nosotros. Así que es eterno. Fue provisto en la cruz, disponible para todos los que acuden a Él. Y luego, en ese mismo momento de la historia pasada, cuando nos arrepentimos del pecado – a seguirlo a Él, se hizo real en nosotros cuando Dios mismo nos perdonó. Es Él que perdona. Así que es eterno.
Aprende a confiar en el Espíritu. Ahora, porque soy Suyo, soy verdaderamente un hijo eterno del Rey de reyes. Y porque eso es cierto, ahora me corresponde a mí vivir como lo que soy, un hijo eterno del Rey. Me muevo y vivo con confianza en Él. Es un proceso de aprendizaje. Aprendo a diario Aprendo a confiar en el Espíritu de Dios dentro de mí, cada vez más, mientras leo en Su Palabra, lo que Él ha dicho acerca de “ser cristiano”.
Este pasaje de 1 de Corintios se trata de eso. A nosotros que creemos nos dice:
Depende del Espíritu de Dios en ti
Vamos a ver los 16 versículos de este capítulo, versículo por versículo: 1 Corintios 2 (Nueva Traducción Viviente)
Versículo 1: Amados hermanos, la primera vez que los visité, no me valí de palabras elevadas ni de una sabiduría impresionante para contarles acerca del plan secreto de Dios.
Confíe en Él, no en usted mismo.
Todo creyente, ya sea como laico, pastor o maestro, cuando hablamos con alguien sobre la fe, dice Pablo, debemos tener cuidado de no caer en un patrón de hablar que es tan común en el mundo, con “una sabiduría impresionante “. (Ver: Gálatas 3:3; 1 Corintios 1: y específicamente los versículos 4-7.)
La forma de la Iglesia, con la predicación y la enseñanza, debe ser la forma de Cristo, la forma del apóstol Pablo: con sencillez y verdad. No debemos dejarnos impresionar por la oratoria, la elocuencia y el discurso filosófico del orador. Deberíamos ser advertidos y reconocer el tipo de conversación que es “de este mundo”, lo que recibe su poder de la arrogancia, el orgullo, los intentos de inflar una reputación o el engrandecimiento.
No desarrolles una actitud.
Esta actitud (engrandecimiento: arrogancia y orgullo) no debe ser practicada por pastores y maestros de la Biblia, ni por ningún creyente:
engrandecimiento: la forma sustantiva del verbo engrandecer, “para aumentar el poder o la reputación de algo”. adjetivo: exhibiendo auto importancia. Sinónimos: grande, jactancioso, cacareando, auto engrandeciéndose, orgulloso, sintiendo autoestima o placer en algo con lo que usted mide su autoestima; o ser motivo de orgullo.
Simplemente comparte su mensaje sencillo.
Pablo tenía un alto nivel de educación, pero no permitió que ese conocimiento cambiara la sencillez del mensaje de Jesús o la forma en que lo presentó. No necesitaba “verse bien” frente a los demás. Y nosotros tampoco.
[Nota de BibleGateway.com] 1 Corintios 2:2 En realidad, Pablo era un estudiante altamente capacitado en los escritos del Antiguo Testamento, la ley judía y en la lógica y la retórica; y evidentemente él también estaba familiarizado con la ley romana. Sin embargo, al predicar el evangelio, se enfocó en el mensaje en sí y en el poder de Dios, y no en las técnicas retóricas de persuasión (ver los versículos 4-5; compara 1:17).
Nosotros hablamos – Él convence.
1 Corintios 1:17
Pues Cristo no me envió a bautizar sino a predicar la Buena Noticia, y no con palabras ingeniosas, por temor a que la cruz de Cristo perdiera su poder.
[Nota de BibleGateway.com] 1 Corintios 1:17 Pablo puede estar refiriéndose al peligro de que convencer a las personas para que se hagan cristianos mediante el uso de una retórica inteligente daría lugar a conversiones falsas (compare 1 Corintios 2: 5).
No es nuestra retórica grandiosa la que debe persuadir a los corazones. Más bien, es la sencillez del evangelio que el Espíritu Santo utiliza para convencer a los no arrepentidos de su pecado. Dios mismo, no nuestras palabras, mueve los corazones hacia la verdadera creencia y el arrepentimiento para la salvación.
No son nuestras palabras sabias, sino más bien “Su misericordia amorosa” que gana corazones para Cristo. Dios usa nuestra conducta piadosa y nuestros “motivos puros y sinceridad piadosa”, pero en última instancia es Su gracia la que lleva a una persona a aceptar sinceramente a Cristo.
2 Corintios 1:12
Podemos decir con confianza y con una conciencia limpia que, en todos nuestros asuntos, hemos vivido en santidad y con una sinceridad dadas por Dios. Hemos dependido de la gracia de Dios y no de nuestra propia sabiduría humana. Esa es la forma en que nos hemos comportado ante el mundo y en especial con ustedes.
Ve también: 2 Corintios 11:3
Versículo 2 Pues decidí que, mientras estuviera con ustedes, olvidaría todo excepto a Jesucristo, el que fue crucificado.
Comparte Su muerte y resurrección.
Lo que todos los pueblos necesitan escuchar es: “Jesucristo, y él crucificado”. Cuando pienso en Jesús, lo que debería venir a la mente es:
- Qué inmensamente afortunado soy de haber sido redimido; de entre la gran cantidad de personas que hay en el universo, fui hecho hijo del Rey.
- Lo inmensamente impactante que fue Su muerte y resurrección, para salvarme, yo que soy un pecador: perdido y rebelde, me salvó de mi camino fangoso.
Guardado de – hacia …
El objetivo principal de Jesús al bajar a la tierra como un ser humano era proporcionar un precedente legal para que Dios nos pudiera liberar de Su santa condena y librarnos hacia su perdón. Ese es el mensaje. Ese fue el enfoque de Pablo. Ese debe ser nuestro enfoque cuando compartimos acerca de Jesús. Evite las “discusiones filosóficas o teológicas sobre cosas y opiniones intrascendentes”.
Versículo 3 Me acerqué a ustedes en debilidad: con timidez y temblor.
Versículo 4 Y mi mensaje y mi predicación fueron muy sencillos. En lugar de usar discursos ingeniosos y persuasivos, confié solamente en el poder del Espíritu Santo.
Sufrir porque testificamos.
Las consecuencias de compartir el mensaje de Jesús a veces son bastante temerosas. Por eso, “la debilidad y el temor y el gran temblor” de Pablo. Los romanos y los judíos de ese día causaron estragos entre los cristianos. El horror similar es causado hasta el día de hoy en los creyentes. Podría pasarte a ti y a mí mañana.
No te dejes engañar por la bravuconada de Hollywood en las películas. La realidad es que la amenaza de tortura provocará miedo en cualquiera. Pero los fieles soportan los miedos y las aguas turbulentas porque saben que serán “resucitados a una vida mejor” (Hebreos 11:35). Pablo conocía el miedo.
He trabajado con más esfuerzo, me han encarcelado más seguido, fui azotado innumerables veces y enfrenté la muerte en repetidas ocasiones. 24 En cinco ocasiones distintas, los líderes judíos me dieron treinta y nueve latigazos. 25 Tres veces me azotaron con varas. Una vez fui apedreado. Tres veces sufrí naufragios. Una vez pasé toda una noche y el día siguiente a la deriva en el mar. – el Apóstol Pablo
El capítulo de los mártires.
Hebreos 11 comparte acerca de los muchos cristianos que sufrieron terriblemente por su fe. Ellos conocían el temor.
… otros fueron torturados, porque rechazaron negar a Dios a cambio de la libertad. Ellos pusieron su esperanza en una vida mejor que viene después de la resurrección. 36 Algunos fueron ridiculizados y sus espaldas fueron laceradas con látigos; otros fueron encadenados en prisiones. 37 Algunos murieron apedreados, a otros los cortaron por la mitad con una sierra[a] y a otros los mataron a espada. Algunos anduvieron vestidos con pieles de ovejas y cabras, desposeídos y oprimidos y maltratados. 38 Este mundo no era digno de ellos. Vagaron por desiertos y montañas, se escondieron en cuevas y hoyos de la tierra.
– Hebreos 11:35-38
El verdadero creyente es mantenido a flote por Dios en cualquiera de esas aguas difíciles, pero los falsos “cristianos” negarán su “fe” no muy real. ¿Eres real, en Cristo? ¿Lo demuestra tu vida?
Versículo 4 Y mi mensaje y mi predicación fueron muy sencillos. En lugar de usar discursos ingeniosos y persuasivos, confié solamente en el poder del Espíritu Santo.
Versículo 5 Lo hice así para que ustedes no confiaran en la sabiduría humana sino en el poder de Dios.
Confíe en el poder de Dios.
Al igual que con las palabras de Pablo, mis palabras acerca de Cristo no dependen de mi gran visión, ni de cualquier genio extemporáneo ganador. No se trata de mí. Mi compartir depende de confiar en el Espíritu Santo en mí. Él tiene el poder.
Pablo está diciendo: Confíe en Su Espíritu. Él está “operando a través de mí” mientras hablo. Confío en Su poder trabajando en “las mentes de los oyentes y persuadiéndolos” (versículo 4). No tengo que preocuparme por mis habilidades … sino confiar plenamente en Su poder. Su poder está en mí. Pero Su poder también actúa en el alma interna de aquellos que están fuera de la fe, convenciendo y persuadiendo los corazones y las mentes de aquellos a quienes “simplemente comparto Su evangelio sencillo”.
Persuadir y convencer, no es mi trabajo. Sé que, si me comunico, Él convencerá.
Versículo 6 Sin embargo, cuando estoy con creyentes maduros, sí hablo con palabras de sabiduría, pero no la clase de sabiduría que pertenece a este mundo o a los gobernantes de este mundo, quienes pronto son olvidados.
Desarrolla un corazón enseñable.
Tener un “corazón enseñable” nos abre para permitir que Dios nos enseñe más sobre cómo Él se ha manifestado en la historia y cómo se está manifestando ahora y en el futuro. Las cosas que son espirituales, como Dios mismo y la verdadera vida “cristiana”, sólo pueden ser entendidas por los que son espirituales, aquellos que tienen el Espíritu Santo en ellos.
Ser “cristiano” no es cuestión de determinar
qué es cristiano y qué no.
Ser “cristiano” es un asunto de Dios.
Él determina la realidad.
Él ya ha determinado cómo será.
A través de la Biblia podemos conocer Su voluntad
al interpretar rectamente la Palabra de verdad (2 Timoteo 2:15).
Dios no nos ha dicho que hagamos nuestro propio camino.
No te engañes a ti mismo y así terminas en el Infierno (Gálatas 6:7).
Fuente: Ser cristiano
El Reino de Dios
Las cosas de Dios (en el ámbito espiritual) no se entienden por los meros humanos (aquellos que no tienen el Espíritu de Dios en ellos). Jesús básicamente dijo esto en Mateo 11.
Mateo 11:25-27
25 En esa ocasión, Jesús hizo la siguiente oración: «Oh Padre, Señor del cielo y de la tierra, gracias por esconder estas cosas de los que se creen sabios e inteligentes, y por revelárselas a los que son como niños. 26 Sí, Padre, ¡te agradó hacerlo de esa manera!
27 »Mi Padre me ha confiado todo. Nadie conoce verdaderamente al Hijo excepto el Padre, y nadie conoce verdaderamente al Padre excepto el Hijo y aquellos a quienes el Hijo decide revelarlo».
El “espiritualmente maduro” en Cristo puede captar la sabiduría superior, la sabiduría de Dios (1 Corintios 2:7 en la versión Amplified en inglés), Porque “el Hijo [deliberadamente] quiere revelarlo” (“Él”, siendo Padre Dios). El mundo no enseña correctamente las realidades de Dios. “Este tiempo presente …” y “los gobernantes y líderes de este tiempo” están ciegos a las verdades de Dios. Debes estar en Cristo, en verdad, para comprender y ser uno que “conoce plenamente y comprende con precisión al Hijo” y sus verdades espirituales.
Eso explica cómo la gente “sabia e inteligente” no lo entiende. El Padre Dios revela el verdadero Evangelio de Cristo a aquellos que lo buscan, “a los infantes [a los nuevos creyentes, a los que buscan la voluntad y el propósito de Dios]”. Cuando estás lleno de ti mismo, no eres como un niño. No lo estás buscando. Y como tal, no cederás tu voluntad a Dios y no lo aceptarás. Jesús mismo dijo:
Lucas 9:23
Entonces dijo a la multitud: «Si alguno de ustedes quiere ser mi seguidor, tiene que abandonar su manera egoísta de vivir, tomar su cruz cada día y seguirme.
Aceptar a Cristo requiere que me aleje de mí mismo, expresarle a Dios mi voluntad de seguirlo, sea lo que sea que venga, y de hecho haga de Cristo lo que más busco en mi vida. Nada más es suficiente. No hay atajos para recibir la vida eterna con el Dios Santo.
Santiago 4:10
Humíllense delante del Señor, y él los levantará con honor.
Versículo 7 No, la sabiduría de la que hablamos es el misterio de Dios, su plan que antes estaba escondido, aunque él lo hizo para nuestra gloria final aún antes que comenzara el mundo;
Versículo 8 pero los gobernantes de este mundo no lo entendieron; si lo hubieran hecho, no habrían crucificado a nuestro glorioso Señor.
Misterio antes oculto. Antes de que Jesucristo naciera en este mundo como el Mesías prometido de Dios, era un misterio para todos: lo que Dios había estado haciendo con nosotros aquí en este planeta . Pero Dios tenía un plan a lo largo del camino. Y todavía lo tiene.
Versículo 9 A eso se refieren las Escrituras cuando dicen:
«Ningún ojo ha visto, ningún oído ha escuchado,
ninguna mente ha imaginado
lo que Dios tiene preparado
para quienes lo aman».
A lo largo del camino, Dios ha tenido Su plan y propósito eterno para nosotros, Su creación. Y finalmente se reveló en Jesús. Los que siguen a Jesús se beneficiarán finalmente según Su plan.
Versículo 10 Pero fue a nosotros a quienes Dios reveló esas cosas por medio de su Espíritu. Pues su Espíritu investiga todo a fondo y nos muestra los secretos profundos de Dios.
A través de los siglos, Dios el Espíritu Santo les reveló Sus planes a los profetas. A medida que avanzaba el tiempo, la Biblia fue formada por el diseño de Dios para que pudiéramos saber “Todo lo que Dios ha preparado para los que lo aman” (v. 9). Como un niño pequeño no puede entender su vida por venir, no podemos captar “los secretos profundos de Dios” (v. 10) y Su Cielo, ya que son “cosas que están mucho más allá del entendimiento humano”.
¿Cómo podemos esperar entender los reinos de Dios? Y sin embargo, esa es a menudo la excusa para no aceptar humildemente a Cristo como Señor. “Me niego a aceptar lo que no puedo entender”, dicen. Hombre necio.
Versículo 11 Nadie puede conocer los pensamientos de una persona excepto el propio espíritu de esa persona y nadie puede conocer los pensamientos de Dios excepto el propio Espíritu de Dios.
Versículo 12 Y nosotros hemos recibido el Espíritu de Dios (no el espíritu del mundo), de manera que podemos conocer las cosas maravillosas que Dios nos ha regalado.
Versículo 13 Les decimos estas cosas sin emplear palabras que provienen de la sabiduría humana. En cambio, hablamos con palabras que el Espíritu nos da, usando las palabras del Espíritu para explicar las verdades espirituales;
No es la “sabiduría humana” lo que nos lleva a comprender a Dios. Entendemos más y más de Dios, cuando le entregamos “nuestro Yo” a Él más y más.
De hecho, sin fe
es imposible
agradar a Dios.
Todo el que desee acercarse a Dios
debe creer
que él existe
y que él recompensa
a los que lo buscan con sinceridad.
– Hebreos 11:6
Versículo 14 pero los que no son espirituales no pueden recibir esas verdades de parte del Espíritu de Dios. Todo les suena ridículo y no pueden entenderlo, porque solo los que son espirituales pueden entender lo que el Espíritu quiere decir.
Espiritual – no carnal. Dios es un espíritu, por lo que el hombre natural, totalmente en la carne, no puede comprender la lógica y las enseñanzas de Dios: El que lo creó todo y vive y se mueve fuera de nuestro mundo (y dentro de nuestros corazones). Todo es “tontería” para los que están en la carne, que son simples humanos. El hombre nunca lo conseguirá hasta que salga de “sí mismo” y crea “… que Dios existe y que recompensa a quienes lo buscan” (con fervor y diligencia) (Hebreos 11:6).
Versículo 15 Los que son espirituales pueden evaluar todas las cosas, pero ellos mismos no pueden ser evaluados por otros.
Versículo 16 Pues,
«¿Quién puede conocer los pensamientos del Señor?
¿Quién sabe lo suficiente para enseñarle a él?».
Pero nosotros entendemos estas cosas porque tenemos la mente de Cristo.
Sé renovado constantemente. El creyente consagrado, recién renovado a través de la confesión del pecado, está lleno del Espíritu de Dios dentro de su hombre interior, y como tal, tiene “la mente de Cristo”. Para tener tal mente, para tener realmente Sus pensamientos y Sus propósitos, debemos ser constantemente renovados “en el espíritu de nuestra mente”, a través de admitir nuestra pecaminosidad y debilidad (“confesión”), a través de la obediencia a Sus caminos, y por medio de asirnos a Sus promesas a lo largo del día.
Sólo como seguidores arrepentidos (discípulos – “aprendices”), podemos ser “guiados por Sus pensamientos y propósitos” (v. 16). Estoy aprendiendo a confiar en el Espíritu de Dios dentro de mí. Es un proceso. Y Dios no ha terminado conmigo todavía.
Depende del
Espíritu de Dios
en ti.
Referencias para más lectura:
Filipenses 1:6
Juan 12:46 … “pongan su confianza en Mí”
* Este artículo se basa sobre Rely on the Spirit of God in you, publicado en inglés: Noviembre 28, 2018.
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