Ustedes han llegado a los espíritus de los justos, que están en el cielo y que ya han sido perfeccionados.
24 Ustedes han llegado a Jesús, el mediador del nuevo pacto entre Dios y la gente, y también a la sangre rociada, que habla de perdón (Hebreos 12:22-24)
Llegar al Cielo no es una cuestión religiosa
29 Jesús respondió: «El más importante es: “Escucha, Israel; el Señor nuestro Dios, el Señor uno es; 30 y amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente, y con toda tu fuerza”. 31 El segundo es este: “Amarás a tu prójimo como a ti mismo”. No hay otro mandamiento mayor que estos “ (Y también Deuteronomio 6:5; Lucas 10:27)