¿De qué se trata tu vida? ¿Qué te impulsa a ti? El día de hoy, ¿qué es lo que te hace a ti lo que eres?
* Si no has nacido de nuevo, entonces, bueno, no importa de ninguna manera, de una forma u otra, de qué se trata – porque todo depende de ti y nadie más debe obligarte a una forma u otra. La ley, sí, pero otras personas, no. Tú eres tu propia persona. Bueno, al menos deberías serlo. ¿Lo eres? ¿Quién te constriñe? ¿Quién te impide ser lo que tú mismo quieres ser? ¿Y por qué? Tú eres el creador de ti mismo.
* Si estás siguiendo a Jesús, el enviado del Padre Dios para representarlo en la tierra, entonces por supuesto que estás restringido por el amor de Dios, y quieres seguir lo que Jesús enseñó. Te has convertido en alguien nuevo por dentro, y la vida adquiere una dimensión totalmente nueva.
La vida de Keith (este hombre que teclea estas palabras) es “una vida nacida de nuevo”, totalmente comprometida con el seguimiento de Jesús. Los valores eternos que Dios me da en la Biblia – me están guiando para ser quien soy, hoy. Lo que soy mañana será… menos de mí y más de Él.
Mi objetivo cada día: ser cada vez más como Cristo mi Dios. No es un proceso de la noche a la mañana. ¡No soy el foco más brillante en la habitación! Quiero decir, no soy el hombre más brillante en la tierra. Pero el Señor es paciente. Todavía no ha terminado conmigo.
Soy salvo. Nacido de nuevo. Pero, sigo siendo un hombre de carne y hueso. Aún.
Estoy sorprendido: después de todos estos años todavía no hago únicamente lo que quiero. A menudo hago lo que no quiero hacer. 1 El “nacer de nuevo” o “seguir a Cristo”… no hace a nadie “sin pecado”. Llegar a ser más justo es un proceso de día a día. Eso es porque todavía estamos en este cuerpo de muerte (la carne).
Ser “mejor”, ser más justo, es la meta de todo cristiano. Pero la madurez cristiana no es tanto una cuestión de pecar menos – ¡es una cuestión de confesarse más rápidamente! En lugar de revolcarse…, uno se aparta del pecado más rápidamente, admitiendo ante Dios “he pecado”, me arrepiento con más rapidez, reconozco el pecado y me arrepiento, me confieso y me renuevo, y empiezo de nuevo.
No quiero ser como los borrachos, como un perro, como un puerco:
- Isaías 19:14 … como los borrachos tropezándose en su propio vómito.
- Proverbios 26:11 [Capítulo completo] … Un tonto quien repite su tontería [sus errores tontos] es como un perro que regresa a lo que ha vomitado [su vómito; “2 Pedro 2:22].
- 2 Pedro 2:22 … Lo que hicieron es como este dicho lleno de verdad [proverbio; parábola]: «El perro vuelve a su propio vómito», y: «La puerca lavada, vuelve a revolcarse en el cieno».
Con la experiencia, uno mira hacia adelante y discierne lo que está bien y lo que está mal, lo que es deseable con Cristo y lo que no lo es. Entrando en la Biblia—uno comienza a ver lo que es la mente de Cristo, y lo que no lo es.
Estoy deseando que llegue el día en que este cuerpo de carne se acabe. Porque entonces Dios me va a dar un cambio completo. Nuevo cuerpo, nueva mente, nuevas capacidades. No podemos ni siquiera acercarnos a saber, o incluso imaginar—cómo será, desde este lado del cielo. La Biblia nos da un vistazo: El cielo está lleno de…
¡… lo que nuestros ojos nunca jamás han visto,
lo que nunca jamás han escuchado,
lo que nuestra mente nunca jamás ha podido imaginar!
Dios tiene planes para nosotros. Él nos tenía en mente—mucho antes de la creación del universo. Mucho antes de la Tierra. Mucho antes de que yo naciera, Él pensó en mí, Keith. Y quería que yo estuviera con Él para siempre. Por siempre en sus gracias. Por siempre libre.
“«Cosas que ojo no vio, ni oído oyó,
Ni han entrado al corazón del hombre,
Son las cosas que Dios ha preparado para los que lo aman». “
— 1 Corintios 2:9 [Capítulo completo]
Continuaré la lucha 2, mientras Dios me mantenga en este planeta, pero, como todo esto, aquí, es meramente temporal—mantendré mi enfoque en la eternidad. ¿Y tú? Lo que realmente cuenta, lo que realmente tiene valor—es mi fe en Cristo, y vivir para Él—vivir con los valores de la eternidad en vista.
“Pelea la buena batalla de la fe.
Echa mano de la vida eterna
a la cual fuiste llamado,
y de la que hiciste buena profesión
en presencia de muchos testigos.“
— 1 Timoteo 6:12
Qué tonto sería si sólo me concentrara en mis días terrestres, cuando mi eternidad es mucho más larga. ¡Por qué desperdiciar mi eternidad viviendo mis días terrestres en pecado, sin perdón, sin estar listo para el cielo!
“ Pero en ninguna manera
estimo mi vida como valiosa
para mí mismo,
a fin de poder terminar mi carrera
y el ministerio que recibí del Señor Jesús,
para dar testimonio
solemnemente del evangelio
de la gracia de Dios.“
— Hechos 20:24
Si no estás “en Cristo”, nacido de nuevo… entonces, por supuesto, ¡todo se vale! Pero, en Cristo, el Dios Creador hace que todo se vea con nitidez, para esta vida, y para la eternidad.
Basado en el artículo The Life of Keith, publicado en inglés: 9 de marzo, 2017.
PARA MÁS:
¿Quién eres en Cristo? (en inglés)
- A menudo hago lo que no quiero hacer: Romanos 7: versículos 14-25.
- Pelea la buena batalla: 1 Timoteo 1:18; 1 Timoteo 6:12; 2 Timoteo 4:7.
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