El Areópago, peñón elevado ubicado en la parte occidental de la Acrópolis de Atenas, estaba consagrado al dios de la guerra, Ares.
Sobre esta colina, residía el Tribunal de la Suprema Corte de Atenas, de la cuál tomaba su nombre. Allí tenían lugar sus celebres sesiones y dictaban sus fallos.
En ese lugar, se reunían también los sabios, filósofos y hombres de estado, para conversar. El lugar tenía capacidad para albergar a cientos de personas y hoy en día, todavía se conservan, labrados en la roca, los asientos de aquella época.
La siguiente imagen del la columnata del Panteón de Atenas, construida sobre el Areópago, fue tomada de: VILA S./ SCUAIN S. Nuevo Diccionario Bíblico Ilustrado. Barcelona: Editorial Clie, 1985.