Imagen: slovinsky.art
Te encuentras de pie allí. Y Dios te está ofreciendo Su salvación.
¿Ves la perspectiva de todo esto?
El pecado no es el problema cuando se trata de ser salvo. ¿Lo sabías? ¿Alguna vez has pensado en eso? O estás diciendo: “¡No sé nada de eso!”.
El lo tiene cubierto
El pecado no es el problema. El pecado no es nunca el problema – cuando se trata de tu salvación en Cristo. Él lo tiene cubierto.
Jesús ya se encargó del “pecado” en la cruz. No irás al infierno a causa de tu pecado. Yo sé, tú probablemente estás diciendo, “¡Yo no sé acerca de eso!” (Sigue leyendo, no te detengas aquí…)
Él ha hecho todo lo necesario para poder perdonarte por tu pecado. El perdón. Está todo listo para ti. El perdón está llamando a tu puerta (Apocalipsis 3:20).
Arte por Pete Garcia
Jesús ya murió. Y Él ya resucitó de entre los muertos. ¡Él lo hizo! ¡Aleluya! Él lo hizo todo, “de una vez por todas“, para poder perdonarte legalmente en el sistema de la Corte Celestial.
Al morir, Jesús dijo: “Consumado es” (versículo 30 de Juan 19:29-30). Él completó Su misión en la tierra. La deuda del pecado fue pagada. Con Su muerte el sacrificio fue hecho, y con Su resurrección la deuda fue pagada. Lo que está en contra de nosotros dentro de las Cortes del Cielo – ya no puede estar en contra de nosotros. Su sacrificio significa que ahora tú puedes pagar esa deuda.
El problema es tu corazón
El asunto del pecado, que eternamente separa a toda la humanidad de Dios – fue, en ese momento, totalmente “arreglado legalmente”. Por Jesús, a través de Su Sacrificio Perfecto en la cruz, y por Su resurrección victoriosa, ahora podemos ser salvos.
El pecado te condena al Infierno, pero es tu corazón el que te mantiene allí, condenado por Dios en la tierra. Por lo tanto tu necesidad de recibir la salvación no es un asunto de pecado – sino más bien un asunto del corazón.
Si cambias tu corazón, cambias tu destino. Permanecerás condenado para siempre si tu corazón permanece igual. Si mueres de esa manera, te quedas de esa manera – condenado para siempre, para siempre sin las bondades de Dios. En eso consiste el infierno.
Cada uno de nosotros debe cambiar su corazón, volverse a Jesús en arrepentimiento y aceptarlo. Con ESE acto Jesús salva.
¡Oh, miedo inquietante a la muerte! ¡Vete! (Arte por Pete Garcia)
En tu camino al infierno – el problema no son todos tus pecados atroces. El problema es tu corazón.
Este pueblo me honra con sus labios,
pero su corazón está lejos de Mí”.
Oh, miedo atormentado a la muerte – ¡Vete de aquí! (Hebreos 2:15)
¿Eres tú?
- Tu corazón está viajando por el camino de la mayoría – el camino ancho que dice Cielo, pero que va al Infierno.
- Has pasado de largo el único camino al cielo – donde “la puerta es pequeña y el camino estrecho“.
- Una y otra vez has rechazado la oferta de gracia. La elección sigue siendo tuya.
- Tu corazón está lejos de Dios y no le escuchas.
13 »Solo puedes entrar en el reino de Dios
a través de la puerta angosta.
La carretera al infierno es amplia
y la puerta es ancha para los muchos que escogen
ese camino. 14 Sin embargo,
la puerta de acceso a la vida es muy angosta
y el camino es difícil,
y son solo unos pocos
los que alguna vez lo encuentran.
Mateo 7: versículos 13-14
La oferta que hace Jesús
Cuando en ese día estés “de pie” ante Dios, Él, El Juez del Universo: ¿Quién te salvará? Ahí estás, condenado por Dios, sin Salvador que te salve. Vaya, ¡qué condenación hecha por Dios! 1 1
Solo hay un, “1”, Salvador para los pecadores. Sólo Uno era lo suficientemente bueno, sin mancha… perfecto. Sólo Jesús era lo suficientemente bueno, perfecto, y por lo tanto capaz de morir en tu lugar, en mi lugar, tomando sobre sí nuestro pecado, nuestra condenación.
Si cambias tu corazón, cambias tu destino
El boleto único al Cielo
La oferta de salvación de Jesús es un ” boleto electrónico ” sólo válido en la tierra. Es una oferta única. Sólo es viable mientras vives. Cuando te vayas de aquí habiendo muerto, ¡no podrás llevártelo contigo! Ni se te ocurra. (en inglés: Thinking Is Incidental?)
No puedes esperar hasta que estés de pie, como un muerto viviente, temblando ante El Trono, y ENTONCES tratar de usar tu boleto al Cielo . De ninguna manera. Todo lo que tendrás entonces es…
vivir para siempre sin la bondad de Dios…
para siempre sin nada bueno (ya que todo lo bueno viene de Dios)
para siempre sin amor (ya que Dios es amor)
para siempre sin consuelo (ya que el infierno es angustia eterna)
para siempre sin alivio del dolor (ya que el infierno es como un fuego inextinguible)
para siempre sin paz (ya que la paz se encuentra en Jesús)
para siempre sin perdón (ya que esta tierra es nuestra última oportunidad de aceptar Su perdón)
– Fuente: Sin miedo al infierno
Bajado del Cielo
No hay otro
No hay otro que sea perfecto, capaz de asumir nuestra sentencia de muerte eterna. Sólo Jesús salva. Sólo Jesús arranca a un pecador de debajo de la ira de un Dios santo y justo.
¿Has captado el intenso odio de Dios hacia el PECADO? No hacia el pecador, sino… ¿hacia el PECADO? Los pecadores impenitentes temblarán y temblarán ante Su ira en el Día del Juicio. Pero no tienes que estar en esa situación. (Siga leyendo…).
Jesús era (y es) el Mesías prometido por Dios según consta en el Antiguo Testamento. Y en la tumba… Jesús finalmente cumplió Su misión, como se registra en el Nuevo Testamento. Dios envió a Su único Hijo a la tierra – para ser el perfecto Cordero de Dios para ser sacrificado “una vez por todas” en la cruz por nuestros pecados (Hebreos 7: versículos 23-28). Jesús vino aquí – para salvarnos.
Jesús mismo dijo de sí mismo: “Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí” (Juan 14: versículo 6). Siete veces afirmó ser divino – con Sus declaraciones “Yo soy” (totalmente entendidas por los judíos de aquel tiempo como queriendo decir “Yo soy Dios”): Jesús declara ser Dios en 7 declaraciones “Yo soy
Jesús afirmó SER Dios
Sólo Jesús salva 
No hay religión alguna que pueda salvarte. Ni siquiera “la religión cristiana” puede salvarte. Sólo Jesús salva.
Sólo Jesús, Él, el Dios-Hombre, puede salvar. Sólo Jesús vino del Cielo mismo. Todas las religiones y filosofías son inútiles cuando se trata de “llegar al cielo”.
No tienen “conocimiento salvador” . Ningún otro “evangelio” que el hombre invente es capaz de expiar nuestro pecado ante Dios Todopoderoso.
El Dios de la Creación estableció Un Camino para llegar al cielo (Juan 1). Él ordenó que sólo Su Hijo nos salvara.
«¡Por fin ha llegado
el tiempo prometido por Dios!
—anunciaba—.
¡El reino de Dios está cerca!
¡Arrepiéntanse de sus pecados
y crean la Buena Noticia!».
Los que se han vuelto a Jesús arrepentidos, y le han seguido con sinceridad y verdad, pueden decir de sí mismos: “Yo…”
“Dios los [me] salvó por su gracia
cuando creyeron.
Ustedes [yo] no tienen ningún mérito en eso;
es un regalo de Dios.
9 La salvación no es un premio
por las cosas buenas que hayamos [he] hecho,
así que ninguno de nosotros puede jactarse de ser salvo”.
Ser “bueno”…no sirve (no podrás dar el ancho, cortar la mostaza) 
La salvación no es una cosa humana. Es una cuestión de Dios. Sólo Jesús nos salva de nuestros pecados.
No te la puedes ganar. No puedes ir a buscarla.
Nunca podremos persuadir a Dios para que nos salve por ninguna cantidad de “bien” que podamos acumular. Nuestro “bien” sólo es bueno en la tierra. Nuestro bien nunca es suficiente. No puede salvarnos. Sólo el don gratuito de Su gracia salvadora puede salvarnos.
Su reino es otra dimensión. ¿Cómo podría un simple humano hacer su camino para ese lugar con tan solo pensarlo?
La entrada a Su Reino sólo la concede Cristo mismo. No hay otro portero allí. Su Reino es ASÍ de exclusivo – muy lujoso, muy especial, cada pedacito vale la “cuota” de entrada (es un regalo gratuito de gracia – pero te costará).
Tu corazón debe tocar el ritmo de los tambores de la banda musical de Jesús
Si tu corazón sigue el ritmo de un tambor diferente [otro] al que marcha la banda de Jesús; si tu forma de ver el mundo no es como Jesús ve el mundo; si estás A FAVOR de lo que Jesús está EN CONTRA... ¿dónde está tu fe en Jesús?- Fuente: ¿Es la cosmovisión de Jesús tu cosmovisión?
“Hay una tendencia a pensar que, como he pecado, no le gusto a Dios, no me quiere y, ¡vaya si está enfadado conmigo! Pero eso no es lo que enseña la Biblia. Eso no es lo que Jesús practicó.
Entonces, ¿por qué la gente condena tanto a la gente que fracasa? En este tiempo en el plan de Dios de las edades para nosotros, Dios no esta condenando a los pecadores. ¡ESO vendrá después! Actualmente Dios está tratando de llamar nuestra atención para que lo aceptemos antes de que sea demasiado tarde!”
– Fuente: Mis caminos atroces, atroces
El entrenador Kennedy orando
Lo que Dios nos pide:
Dios te está pidiendo que te arrepientas.
*1. Acércate a Él honestamente, como un niño.
Sé sincero, tan transparente como la fe de un niño (Marcos 10:15). Jesús conoce nuestros pensamientos.
Dios puede ver el interior de nuestra alma. Conoce “los pensamientos y las intenciones de nuestra mente“.
No hay manera de fingir que Él no pueda desenmascarar. Fingir invalida cualquier “experiencia de salvación” que creamos haber tenido.
Les digo la verdad,
el que no reciba
el reino de Dios
como un niño
nunca entrará en él».
– Marcos 10:15
*2. Acércate a Él humildemente reconociendo que Jesucristo es verdaderamente Dios. Tú no eres más que barro, y Él es el Maestro Alfarero (Romanos 9:21).
“6 Y él da gracia con generosidad. Como dicen las Escrituras:
«Dios se opone a los orgullosos
pero da gracia a los humildes».
7 Así que humíllense delante de Dios….”
– Santiago 4:6-10
*3. Cree que Jesús es Dios, así como lo es, que bajó a la tierra como un ser humano de carne y hueso para salvarnos. Él es nuestro Dios-hombre, venido en carne siendo totalmente Dios, totalmente hombre. Fue crucificado, murió, fue sepultado y luego resucitó de entre los muertos.
“Creer”
Esto es lo que significa “creer”:
El texto griego original, “creer en Jesús”, – no es meramente un tipo de creencia basada en hechos, no es sólo un asentimiento mental. (Incluso los demonios “creen” intelectualmente acerca de Él…. Ese tipo de asentimiento mental no es el “creer” griego).
La fe salvadora
… es una acción de aceptar.
Dios requiere inmersión total, ya que el bautismo simboliza tomar Su tinte 2, tomar Sus colores.
El bautismo en agua es un testimonio al mundo de tu nueva vida en Cristo. No te salva, pero, en obediencia a Sus instrucciones – simboliza lo que sucedió cuando fuiste salvo: Eres bautizado en Su muerte al ser sumergido en las aguas bautismales, y luego resucitado a una nueva vida al ser levantado de las aguas.
El matrimonio es otro símbolo de esta salvación: abandonando a todos los demás, te aferras a Él, y sólo a Él, toda tu vida, sin aceptar a ningún otro.
Creer en el Señor Jesucristo: (Haz clic en un enlace que contenga todos los versículos) Romanos 10:9-10; 1 Tesalonicenses 2:13; Juan 4:42; Juan 6:29; Juan 19:35; Hechos 8:30-38; Hebreos 11:6; 1 Juan 5:5; Efesios 2:8-9; 2 Timoteo 1:12
* Creer en Jesús… es aceptarlo por completo como tu Señor, tu Dios. Con todo lo que eres, das este paso de fe para entregarte a Él.
** Creer” implica darle todo de ti (no sólo pedacitos de ti) – porque reconoces que Él es Dios, tu Señor y tu Salvador. En tu confesión de arrepentimiento y creencia – te comprometes a seguir a tu Salvador hasta el final.
La confesión con tu boca, el que lo digas en voz alta – expresa lo más profundo de tu corazón. Si dices “Jesús es el Señor”, y en tu interior reconoces que “Dios lo resucitó de entre los muertos” – en ese instante, “…serás salvo”.
Si declaras abiertamente que Jesús es el Señor
y crees en tu corazón que Dios lo levantó de los muertos,
serás salvo.
10 Pues es por creer en tu corazón
que eres hecho justo
a los ojos de Dios
y es por declarar abiertamente
tu fe que eres salvo.
– Romanos 10:9-10
*4. Síguelo.
Ahora que Dios te ha perdonado [tiempo pasado], ahora que te llama Su hijo o hija (“un hijo del Rey“, un heredero de Su Reino) [tiempo presente] – lo natural para ti como “una nueva creación”, es seguirle “con todo tu corazón“, totalmente entregado a Él.
A esto se le llama “obras”. Tu fe es naturalmente acompañada por “tus obras” – demostrando una fe genuina.
… “Ama al Señor tu Dios
con todo tu corazón,
con toda tu alma,
con toda tu fuerza y
con toda tu mente”
y “Ama a tu prójimo
como a ti mismo”.
– Lucas 10:27
Mi salvaje y loco corazón de semental
Después de ese momento de salvación en el que somos hechos completamente nuevos, seguirá habiendo debilidad y fracaso, tentación y pecado. Ese salvaje y loco corazón de semental se sacudirá y te tirará a veces. Eso es porque todavía estamos en este “cuerpo de carne” que lucha con nuestro nuevo espíritu (Romanos 7:4-25; 8:1-17).
Pero el pecado ya no es tu Amo. Ya no eres esclavo del pecado (Romanos 6:1-14). Has sido liberado (Romanos 8:9-13), y el Espíritu Santo vive dentro de ti (en el trono de tu vida).
24 ¡Soy un pobre desgraciado!
¿Quién me libertará
de esta vida
dominada por el pecado y la muerte?
25 ¡Gracias a Dios!
La respuesta está en
Jesucristo nuestro Señor…
– Romanos 7:24-25
¿Eres tú?
Ahora que estás en la familia de Dios, es alentador y fortalecedor saber y recordarte a ti mismo – que el Espíritu Santo reside dentro de ti:
Pero ustedes, mis queridos hijos,
pertenecen a Dios.
Ya lograron la victoria sobre esas personas,
porque el Espíritu que vive en ustedes
es más poderoso
que el espíritu que vive en el mundo.
– 1 Juan 4:4
Podemos caminar en la voluntad de Dios cuando lo miramos a Él, y confiamos sólo en Él. Ante cada duda, acudimos a Dios en busca de fortaleza. (Ver: Dios perdona todas las maldades de todos los pecadores arrepentidos, sin excepción)
Asiste a una iglesia local que enseñe la Biblia y que siga a Jesús de verdad. Cuidado, porque muchas iglesias hoy en día son dirigidas por falsos maestros que te llevarán por mal camino. No asistas a estas iglesias si quieres seguir lo que la Biblia verdaderamente enseña.
Sí puedo – Puedo mantenerme fuerte
(en inglés: Yes I can – I can stand strong).
17 Esto significa que todo el que pertenece a Cristo se ha convertido en una persona nueva. La vida antigua ha pasado; ¡una nueva vida ha comenzado!
18 Y todo esto es un regalo de Dios, quien nos trajo de vuelta a sí mismo por medio de Cristo. Y Dios nos ha dado la tarea de reconciliar a la gente con él. 19 Pues Dios estaba en Cristo reconciliando al mundo consigo mismo, no tomando más en cuenta el pecado de la gente. Y nos dio a nosotros este maravilloso mensaje de reconciliación. 20 Así que somos embajadores de Cristo; Dios hace su llamado por medio de nosotros. Hablamos en nombre de Cristo cuando les rogamos: «¡Vuelvan a Dios!». 21 Pues Dios hizo que Cristo, quien nunca pecó, fuera la ofrenda por nuestro pecado,[a] para que nosotros pudiéramos estar en una relación correcta con Dios por medio de Cristo.
Basado en el artículo The one-off offer Jesus makes to everyone, publicado en inglés: 12 de octubre del 2022.
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Por Gracia y Pura Misericordia
El Regalo por Su Gracia Preciosa e Inmerecida
El Reino de Dios es muy exclusivo, muy lujoso, muy especial
Dios y el Hombre tienen libre albedrío para elegir | por Dennis Swick (publicado en inglés: God and Man have free will with which to make a choice).
Dios quiere que todos seamos salvos
Más adelante entenderemos por qué
Yo no elegí una religión. . . Elegí una forma de vida que sanó mi espíritu
Sólo el camino de Dios lleva a Él
¿Pensar es secundario? (publicado en inglés: Thinking Is Incidental?)
Sabemos lo que Jesús cree. ¿Estás de acuerdo con Él?
¿Es la cosmovisión de Jesús – tu cosmovisión?
Decreto celestial en nuestra contra
Condenado por Dios en la tierra
La salvación es cuestión de Dios
Sólo Jesús nos salva de nuestros pecados
Hoy es tu último día – y el Infierno será tu hogar esta noche
¿Tu pensamiento o la Palabra de Dios?
Extracto de Las Penas del Juicio Final (publicado en inglés: The penalties of the last judgment).
El último pecador
Me pregunto quién será el último pecador. Sería un dato curioso. ¿Quién será esa pobre, desafortunada y perdida alma? ¿Quién pecará por última vez? ¿Hablaremos de eso en los eones del más allá? ¿Nos preguntaremos por qué pecamos… viendo lo grandioso que es el Cielo? “¿Cómo diablos caí en ese comportamiento pecaminoso toda mi vida?“
¿Cuál será el último pecado? Para averiguarlo: Sintonice el Día 1 del Post-Milenio – Año 1001. Sospecho que los incorruptibles reporteros investigadores de los medios de comunicación universales Star Light News nos darán la verdadera primicia. Por fin podremos confiar en los medios de comunicación.
Acerca de la muerte y el morir
El cielo es donde – la tierra estará detrás de nosotros
Nuestro morir y nuestra muerte
La Muerte. Qué manera tan maravillosa de explicarlo
La obra incesante de Dios dentro de ti y de mí
Oh miedo atormentador de la muerte – ¡Vete de aquí! (Hebreos 2:15)
Aunque mueras, vivirás (publicado en inglés: Even if you die, you will live)
Muchos falsos profetas y maestros han salido por el mundo
Maestros falsos (publicado en inglés: Calling out false teachers).
¿Por qué escuchar a un falso maestro?
La NRA – “Una nueva ‘reforma’ a la que muchos no se dan cuenta de que se han unido”
Reflexiones posteriores a la Nueva Reforma Apostólica por Rick Becker
Notas a pie de página
- Extracto de Condenado por Dios:
El dios Santa Claus
Sin embargo, hoy en día muchos quieren un Santa Claus que se ría a carcajadas. Este dios moderno:no tiene predilecciones, ni predisposiciones, y nunca se enfada con nada de lo que hacemos o pedimos. Este dios sigue la corriente. Este dios nuestro lo acepta todo, lo que queramos. No tiene predilecciones, ni prejuicios contra nada. No tiene intolerancias fijas ni predeterminadas. Lo que seas, lo que sea, ¡le parece bien! Este “Dios Claus” ha sido creado para nuestra conveniencia.
Nos engañamos tan fácilmente. Todo lo que nos gusta más o menos, o lo que realmente nos gusta… le parece bien a nuestro “Dios Claus”. Es fácil seguir a este “dios”. ¡Claus no nos impone límites!
La Biblia enseña acerca de un Dios santo, no un dios Santa Claus. No es una figura imaginaria fabricada, conjurada, con la que queramos relacionarnos en nuestros propios términos, sino el Dios Santo real y verdadero de los Cielos, el Único Dios Creador que hizo todo lo que existe en cualquier lugar del universo, el que todavía tiene el control.
En términos que podemos comprender, Dios comparte con nosotros en la Biblia cómo Él es en realidad. Y nuestra cultura moderna odia eso. ¿Te das cuenta?
Entonces, ¿qué hay de una verdadera condena hecha por Dios? En contraste con una condena por una persona: ¿Cómo es una maldición de Dios? ¿Cómo será estar frente al Dios Creador en el Día del Juicio Final, y recibir Su ira? Es algo en lo que realmente hay que pensarse. ¿Puedes sentir la finalidad de todo en ese momento?
Una persona puede condenarte, pero, ¿qué va a hacer eso? No mucho. Sin embargo, en el Día del Juicio, condenado por Dios es:
para siempre mala, para siempre implacable, nunca cambiable – permanente en el universo. Una condena divina declarada por Dios mismo hará que el corazón humano tiemble como una gacela atrapada en las fauces del león.
Puedes discutir todo lo que quieras ahora. Pero, ante el Dios Creador, no habrá margen de maniobra para escapar. Para los seguidores de “Dios Claus” en ese día, como con todos los que rechazan a Cristo, no habrá escapatoria de la ira del Santo Dios del Juicio. – Extracto de: Condenado por Dios.
- El bautismo: un simbolismo de un paño que se tiñe de colorante, cambiando de color en la novedad de la vida.
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