El Reino de Dios es muy exclusivo, muy lujoso, muy especial

La entrada al Hogar de Dios en el cielo va a ser—¡Oh, muy sorprendente! ¡Maravilloso! Imagina estar con nuestro amoroso Dios lleno de misericordia y gracia—por toda la eternidad.

Todos están invitados a estar allí. Pero, no cualquiera entra.

Llegar allí es difícil. Francamente, dudo que alguna vez lo hagas. ¿Tú qué dices?

“Son solo unos pocos los que alguna vez lo encuentran”
(Mateo 7:14)

No es que la salvación sea complicada. En realidad, es muy simple. Lo difícil es—el corazón. Si mantienes tu corazón salvaje y loco a todo lo que da durante demasiado tiempo, Dios podría eventualmente darte rienda suelta. Y ese será tu fin, estarás perdido.

¡Lo que está en juego es enormemente gigantesco! No seas un tonto (en inglés: Don’t Be A Doofus) que vende su corazón. En todo caso, ¿qué vale tu alma?

Tienes que quererlo. El mismo Dios que murió por nosotros en una cruz, quiere que pasemos toda la eternidad en relación con Él. ¿Es lo que quieres?

El camino recto y estrecho hacia el Cielo todavía está abierto y disponible. Hay una oportunidad muy real para que te subas a él, hoy. Es tu decisión.

¿Has tomado una postura (en inglés: There comes a time to stand for Jesus, or deny Jesus)? ¿Por cuál de los dos caminos estás dispuesto a morir (en inglés: Two roads to die for)?

La más importante elección que hacemos todos, de una manera u otra, es:

¿Vas con Dios?

¿Mantienes tu rumbo en el camino hacia el lugar eternamente malo? (¡Realmente es un lugar real!)

— Fuente: Dos caminos por los cuales morir (en inglés: Two roads to die for)

¿Conoces el camino estrecho? Es el que sigue a Jesús. ¿O sigues en el camino ancho hacia la destrucción?

Este Reino es muy Exclusivo (significado de “exclusivo”)

Es más que fácil entrar en el infierno (en inglés: Going To Hell?). Es muy obvio: ¡Solo olvídate de ello! Sigue tu camino por el que estás, condenado por Dios en la tierra.

Es más fácil entender la exclusividad del Reino de Dios cuando nos damos cuenta—Dios es Santo. El hecho de que Él incluso ofrece a los pecadores una oportunidad… es asombroso.

¿No traes puesto camisa ni zapatos? No vas a entrar.
¿No eres santo? No entrarás.
¿Viviendo la vida “a tu manera”? No vas a entrar.
¿Tienes a Jesús? Entrada concedida.

Seguir a Jesús con sinceridad y verdad es la única vía que Dios nos ha dado. ESO es exclusivo.

Antes de llegar a la entrada, tienes que ser salvo. Cuando nacemos de nuevo, Dios mismo nos declara legalmente “santos” (en inglés: Bought with a price—the blood of Jesus) ante Su Tribunal de Justicia, y luego Él trabajará con nosotros sin parar para que podamos caminar en Sus Caminos (en inglés: Fight the good fight). Somos transformados instantáneamente (en inglés: Re-starting life), se nos da una nueva posición, y somos hechos “un hijo del Rey”.

Tan simple como eso: El Dios Creador Todopoderoso, El Único, proveyó acceso legal a Su Lugar—por Su santa, santa justicia (en inglés: God forgives sins by His Holy Holy Justice).

“Les escribo esta carta a ustedes,
que gozan de la misma preciosa fe que tenemos.
Esta fe les fue concedida debido a la justicia e imparcialidad
de Jesucristo, nuestro Dios y Salvador”
— 2 Pedro 1: versículo 1

Qué importante es “estar en la misma página” con Dios. No hay otra página. Somos Su creación, así que Él pone las reglas.

Dios tiene la maldita razón, y más vale que pienses bien antes de que sea demasiado tarde. Hay un infierno por pagar para aquellos que no lo hacen.

Dios es un Dios que condena. [Sin el perdón de Cristo—eres un maldito hombre de barro. Simples hombres. ¹ Y Su juicio es eterno.

Tu pensamiento es un vapor en el viento, mientras que la Palabra de Dios es eterna—y real.
— Fuente: El Dios que condena

Eres un mero hombre, un humano creado, viviendo tus días en la tierra de Dios hasta que Él se digna a llamarte al frente de Su Corte a Su Trono de Juicio, y te dice: “¿Qué hiciste con mi Hijo, Jesús?” ²

Dios es todo lo que importa. Él importa porque en Aquel día, algún día, nosotros (¡cada uno de nosotros!) estaremos ante Él, el Juez Definitivo, para dar una cuenta definitiva. Y si lo que piensas no es lo que Dios piensa, entonces… ¿quién está fuera de lugar? ¿Quién tiene el “pensamiento” equivocado? ¿¡Es Dios!? ¿Es Dios el que no tiene Su pensamiento correcto? ¿O eres tú?

Y entonces, ¿qué vas a hacer en Aquel día? ¿Discutir con y suplicar al Todopoderoso? ¿Realmente crees que eso funcionará? Tú eres la masilla, el barro, en las manos del Escultor. ¿Acaso el barro va a cuestionar al alfarero? Me quedo asombrado mirando al arrogante hombre de barro agitando su pequeño e insignificante puño de barro – ¡a Dios, el Alfarero! ¡A Dios! ¡Ja! Qué descaro. Qué inutilidad, qué desesperación, qué remordimiento.
— Fuente: El Dios que condena

No te preguntará lo que piensas. Puede que no te pregunte nada. Puede que toda tu vida pase por delante de ti en un instante, y que te quedes allí confundido, condenado, con todo tu pecado sin perdonar—todo dentro de tu responsabilidad.

— Fuente: Siguiendo a alguien

Una experiencia de salvación que no conduce a la obediencia a Cristo, no es “la misma ^{[punto b]} preciosa fe que tenemos”, como dice Pedro (2 Pedro 1:1). [Ver también: Hebreos 10:29] Con ese tipo de fe, en realidad sigues perdido, sigues sin salvación, sigues condenado, sin fe, inconstante y engañado por El Maligno. Te estás engañando a ti mismo, con esa clase de “fe”. Has pasado por alto tu única esperanza.

El perdón de Dios es tan poderoso y tan misterioso. Pero sabemos lo que Él requiere de nosotros. Tenemos Su Palabra, la Biblia.
— Fuente: La entrada a lo eterno ha sido concedida

Piensa en el pecado como un virus
Si tu fe difiere del “Evangelio de Mateo, Marcos, Lucas, Juan y Pablo“, entonces tu fe no es algo que mata los virus—¡es un virus asesino en sí mismo! No mata tu pecado, sino que es cómplice de tus pecados.

Si tu tipo de fe es una variante de lo que la Biblia realmente enseña (en inglés: Why the Bible), entonces tu “fe” es en realidad un virus asesino. Con una variante, tu “salvación” no es la verdadera. La fe falsa no tiene valor en las puertas del cielo.

“No te engañes con tu pensamiento limitado.
¿No te das cuenta de que esta no es la manera de vivir?
La gente injusta que no se preocupa por Dios
no se unirán a Su reino….”
— Fuente: Pensamiento Limitado; paráfrasis ampliada de Swift de 1 Corintios 6:9-20

Basado en el artículo The Kingdom of God is very exclusive, very luxurious, very special, publicado en inglés: 27 de enero, 2022.

PARA MÁS:

La entrada a lo eterno

El cielo. ¿Cómo será?

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Quiérelo—para conocerlo… el mensaje de Dios para nosotros

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Lo que Dios hizo por el hombre (en inglés: What God Did for Man)

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